Temer se separa hasta de los problemas de Dilma

El vicepresidente de Brasil, Michel Temer, recurrió al Tribunal Electoral para obtener el “permiso de defensa por separado”, es decir que nada de lo que se le impute a Dilma Rousseff pueda utilizarse en una futura acusación contra él.

Temer alega que él no tiene nada que ver con la financiación ilegal de la campaña que llevó a Rousseff a la presidencia y a él la vicepresidencia. Según detalla en el escrito presentado a la Justicia, el PMDB -su partido- nunca recibió el dinero sucio que financió la campaña de Dilma.

Para probarlo, hace referencia a la declaración ante la Justicia de Otavio Marques Azevedo, ex-CEO de la constructora Andrade Gutierrez, que admitió haber desviado fondos de la corrupción en Petrobras para solventar los gastos de campaña del PT, pero no del PMDB.

La relación entre Rousseff y su vicepresidente ha quedado rota tras la filtración de una grabación del discurso que Temer tenía preparado en caso de acabar asumiendo la jefatura del Estado.

“Sin ser pretencioso, pero con mucha modestia, debo decir que tengo una vida pública de mucha experiencia (...). Naturalmente, conociendo razonablemente los problemas del país, si el destino me lleva a esa función (...) estaré preparado”, adelantó ayer a los medios.

Mientras, el Partido Social Democrático (PSD) anunció ayer que la mayoría de sus diputados se ha manifestado a favor de una posible destitución de la presidenta brasileña. El domingo se decide si el caso va al Senado. Agencias