
Serrano tiene la ultima palabra sobre deportacion de los cubanos
El caso de Jesús Pérez López es el mejor ejemplo. Un juez negó la deportación de ese ciudadano cubano, pero su caso se “elevó en consulta al Ministerio del Interior”.
El caso de Jesús Pérez López es el mejor ejemplo. Un juez negó la deportación de ese ciudadano cubano, pero su caso se “elevó en consulta al Ministerio del Interior”.
Lo mismo sucedió en todas las audiencias que se desarrollaron el 7 de julio de 2016, “con lo cual se violenta la independencia y autonomía del sistema de justicia ecuatoriano”, denunciaron los defensores de más de un centenar de isleños que fueron detenidos, la madrugada del miércoles, por tener una situación migratoria irregular.
Por eso, abogados y familiares temen que, aunque los jueces determinen la libertad, los isleños sean deportados.
Y no es el único problema que enfrentan. Ayer, las medidas cautelares (suspender audiencias de deportación) para los cubanos fueron negadas.
Además, el tribunal penal notificó que la solicitud de habeas corpus, presentada por los abogados, está incompleta. “Es una excusa para hacerse los locos y darnos la audiencia el martes”, dijo a EXPRESO Juan Pablo Albán, uno de los defensores. Según él, para ese momento los extranjeros podrían ser deportados.
¿Qué otras anomalías existen? Según la defensa, los partes policiales solo se refieren a la situación migratoria y omiten la detención arbitraria y las autoridades no informan a los cubanos que tienen derecho a solicitar refugio.
Mientras tanto, los cubanos siguen detenidos en varios recintos de la capital. Las audiencias de deportación podrían extenderse hasta la próxima semana.
Para los detenidos las jornadas son difíciles. Ayer, por ejemplo, dos buses volvieron a llevarlos desde la Fiscalía de Flagrancia a la Unidad de Contravenciones, para el segundo día de audiencias. Las diligencias, sin embargo, se suspendieron a las 10:00. Una ciudadana cubana debió salir del vehículo para vomitar y fue atendida por paramédicos.
Y los buses volvieron a llevarse a los extranjeros. “Pasamos noches muy malas durmiendo en el suelo”, dijo desde la ventana del bus, José Alberto Martínez, uno de los detenidos.
Aunque no todas son malas noticias. El jueves, por resolución inmediata, fueron liberadas 13 personas. ¿La razón? Tener a su cargo familiares menores de edad o haber comprobado que están en situación regular en el país.