La rosca se adelanta a los Reyes y se vuelve navidena
El roscón o rosca de Reyes tiene un toque de postre confitado, relleno de manjar, chocolate y frutos secos, y su tradición era servirlo el día de ‘Los Reyes Magos’.
No es un pan de dulce ni con frutas, aunque su masa pueda resultar parecida. El roscón o rosca de Reyes tiene un toque de postre confitado, relleno de manjar, chocolate y frutos secos, y su tradición era servirlo el día de ‘Los Reyes Magos’. Era, porque en algunas panaderías su elaboración ya ha empezado y su presencia en perchas se incrementa día a día.
Esta tradición, que se había dejado para el 6 de enero, se ha ido arraigando en la ciudad y ahora es posible degustarla desde ya. Panaderías como California, La Española, Donremi, y hoteles como Unipark y Oro Verde, son algunos de los locales donde se puede conseguir este dulce.
En panadería La Española se ofrece la rosca de Reyes “tradicional”, con la receta “original” de España, de donde es traída, asegura José Rabascall Nebot, fundador de la también pastelería.
Para él, la tradición en el país no es muy antigua, data de hace unos 10 años, pues en los más de 30 años que tiene establecida esta empresa, el consumo era limitado al principio.
Su hijo José Fernando, gerente general de La Española, considera que con la migración que tuvo el país, la gente que se fue a España empezó a conocer de la rosca de Reyes y al regresar al país trajo esta costumbre culinaria, por lo que se hizo “popular”.
Esta panadería proyecta producir unas 5.000 roscas para atender la demanda que se aproxima, cuya fecha insigne contempla un período entre el 2 y 6 de enero.
En otro lugar donde la rosca se prepara a diario es en panadería California. El chef pastelero, Germán Mendoza, indica que la receta se ha ido acoplando con el tiempo, desde hace unos 20 años que la vienen mejorando.
“Al principio solo se hacía una especie de dona, luego fuimos entrelazando la masa y probando los ingredientes. Por ejemplo, se utiliza un manjar de leche especial para hacer el relleno, no cualquier manjar soportaría los 150° centígrados de la horneada, porque se deterretiría, se pegaría a la masa”, explica Mendoza.
La preparación incluye un amasado que toma unos treinta minutos y un reposo de alrededor de 12 horas, luego viene la aplicación de las frutas confitadas y al horno por una hora; luego se deja enfriar por 120 minutos. En total, una rosca de Reyes tarda casi 16 horas para ser embalada y que salga de la planta para ser degustada.
Esta empresa, que ofrece aproximadamente 200 productos distintos, tiene proyectado elaborar unas 18.000 unidades de la tradicional rosca de Reyes.