El remedio, peor que la enfermedad

Las declaraciones del presidente de Filipinas sobre la recompensa que su gobierno pagará por la entrega de un capo de la droga, vivo o muerto y la incitación a que extraños maten a cualquier drogadicto, son temas que pueden salirse de control. El remedio saldrá más caro que la enfermedad.

El narcotráfico tiene dinero, armas y personas contratadas para su protección y al abrirse la temporada de cacería, muchas personas civiles, motivadas por la recompensa intentarán la odisea, cuyas evidentes desventajas son un ejemplo más de lucha entre cordero amarrado versus león suelto.

Al leer esta noticia, oré para que en Ecuador no lleguemos a esos extremos ni en sueños.

Carlos Cordovez de la Gasca