La relación entre Aquiles Álvarez y Rafael Correa: un análisis histórico

El reciente cruce virtual de palabras entre el alcalde de Guayaquil, Aquiles Álvarez, y el expresidente ecuatoriano Rafael Correa se suma a las varias confrontaciones que ambos han mantenido desde que arrancó su relación pública en las elecciones de 2023.

A través de una publicación en sus redes sociales, Correa calificó de "vomitiva" la contratación del jurista Ramiro García Falconí como abogado de Álvarez en el caso Triple A, en el que el alcalde es procesado en la investigación por presunta comercialización irregular de combustibles.

El alcalde, por su lado, respondió a Correa con un mensaje contundente en el que cuestionaba y decía que le daba "muchísima pena" que se ataque a su abogado y no esperar a que se solucione su caso. Incluso señaló que el ataque fue innecesario, ya que él no fue ni siquiera fue mencionado. Sin embargo, la relación entre ambos no siempre fue así.

Rafael Correa y Aquiles Álvarez: una relación que inició como luna de miel

Aunque ambos ya eran personajes públicos, Álvarez como dirigente de Barcelona SC y Correa como expresidente que estuvo diez años en el poder, su vinculación se hizo pública cuando se anunció, en 2023, la candidatura de Álvarez a la Alcaldía de Guayaquil bajo el auspicio del correísmo.

La candidatura en los comicios seccionales de 2023 fue la primera experiencia política electoral de Álvarez y la nueva apuesta del correísmo para hacerse con el Municipio de Guayaquil, reducto que hace más de tres décadas era controlado por el Partido Social Cristiano (PSC).

Y la fórmula funcionó. Pese al sentimiento de victoria de los socialcristianos, el correísmo no solo logró hacerse con la Alcaldía de Guayaquil, sino también con la Prefectura del Guayas con Marcela Aguiñaga, exasambleísta y exministra del expresidente Rafael Correa.

La República de Guayaquil y los primeros roces entre Correa y Álvarez

La cordialidad entre Rafael Correa y Aquiles Álvarez duró exactamente un año, ya que para el 16 de mayo de 2024 el cambio de nombre de una calle de Guayaquil daría pie a los primeros roces entre ambos vía redes sociales.

El motivo de la disputa para entonces era la propuesta de renombrar la calle 10 de Agosto como República de Guayaquil, un pedido de una organización civil guayaquileña que para el correísmo no tenía ningún sentido histórico.

Aunque Álvarez defendió el cambio en sus diferentes intervenciones públicas, Correa cuestionó la decisión del Municipio. "Siempre la oligarquía guayaquileña ha tratado de romper la unidad nacional y, para ello, aprovecha los momentos de grave descomposición como los que vivimos", comentó.

La dolarización, otra tema que enfrentó a Rafael Correa y a Aquiles Álvarez

Otro año después y entrada la campaña de la primera vuelta de las elecciones generales de febrero de 2025, Correa y Álvarez tuvieron un nuevo cruce de ideas por la dolarización. Mientras el correísmo hablaba de una 'ecuadolarización', el alcalde decía que "solo un pendejo saldría de la dolarización".

La dolarización salió a flote porque para ese comento el Consejo de Administración Legislativa (CAL) de la Asamblea Nacional aprobó la creación de una comisión ocasional para tramitar la enmienda al artículo 303 de la Constitución para reconocer expresamente al dólar como moneda oficial.

Asimismo, las entonces legisladoras Gissela Garzón y Paola Cabezas declararon públicamente que el Ecuador requiere de una "dolarización a la ecuatoriana" para tener salidas ante la crisis económica que enfrenta el país.

La victoria de Daniel Noboa y el señalamiento de desleales en el correísmo

Unos meses más tarde, en abril de 2025, la victoria de Daniel Noboa sobre Luisa González también fue motivo de disputa entre Aquiles Álvarez y Rafael Correa. Aunque el correísmo alegaba que hubo fraude en la segunda vuelta, varias autoridades locales, entre ellas Álvarez, reconocieron la victoria de Noboa.

"Si el pueblo eligió, hay que respetarlo. Más allá de que nos guste o no, el pueblo eligió democráticamente y hay que ser honestos en reconocerlo. Lo peor es ser un mal perdedor", publicó en su cuenta de X Álvarez, mientras Correa iniciaba sus teorías de fraude electoral.

Otro mes más tarde, cuando el correísmo ya ensayaba la teoría de la tinta transferible, Correa fue más crítico con las autoridades que reconocieron a Noboa. "Hay gente que se apresuró a reconocer los resultados y fue un error, porque nuestra presidenta del movimiento y candidata, Luisa González, no los aceptaba. No debieron avalar algo así".

Correa incluso sostuvo que "el que tiene esa actitud debería irse, es una actitud infantil, torpe, tonta, cómo quieren que se consulte a todo el mundo, si estábamos en tremenda crisis, pensábamos ganar y nos ganan con 1.200.000 votos, pensamos que es imposible, hay que tomar decisiones y hay que tomar decisiones en pocas horas".

Álvarez y su alejamiento de Correa: "A nosotros no nos apoyó nadie, solo el pueblo"

Previo al cruce de palabras por el caso Triple A, el alcalde Aquiles Álvarez terminó de marcar distancia de Rafael Correa durante una sesión del Concejo Municipal de mayo de 2025. "A nosotros no nos apoyó nadie, solo el pueblo", dijo Álvarez, pese a recibir el apoyo del correísmo.

Las declaraciones de Álvarez llegaron en medio de los rumores de que se separaría del correísmo y se afiliaría definitivamente al movimiento político RETO, que ahora dirige su amigo exconcejal y actual asambleísta nacional, Raúl Chávez.

No obstante, su cercanía con RETO cada vez se ha vuelto más evidente. Una última muestra de ellos fue cunado el Cabildo decidió reemplazar a Blanca López, del correísmo, de la Vicealcaldía de Guayaquil por la concejal Tatiana Coronel, vicepresidenta nacional de RETO.

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