Función. El presidente de la Cámara de Representantes, Paul Ryan.

Primer paso hacia la unidad republicana

El aspirante republicano a la Casa Blanca, Donald Trump, se reunió en Washington con líderes del Partido Republicano con vistas a recuperar la unidad y curar las heridas abiertas por las primarias.

“Fue un paso muy positivo hacia la unidad” del partido y “una gran oportunidad para ganar (las elecciones), y estamos totalmente comprometidos a trabajar juntos para conseguir ese objetivo”, sostuvieron ayer Trump y Paul Ryan, presidente de la Cámara de Representantes, en una declaración conjunta divulgada tras el encuentro.

“La reunión fue sensacional”, tuiteó momentos antes el presidente del comité nacional del partido, Reince Priebus, quien también participó.

El magnate neoyorquino llegó un poco antes de las 09:00 a la sede del Partido Republicano, que está a dos pasos del Capitolio, para reunirse con Priebus y Ryan, un conservador que emprendió en octubre la modernización de la imagen del Partido Republicano.

Unos pocos manifestantes lo esperaban fuera de la sede con pancartas en las que podía leerse “Trump es racista”.

Las divergencias son profundas y hay grandes desafíos financieros (el partido debe recaudar cientos de millones de dólares para la campaña) y políticos por delante, porque los republicanos temen perder su mayoría en el Congreso en noviembre. Ryan sorprendió al declarar la semana pasada que aún no estaba listo para apoyar a Trump, un anuncio impactante para quien presidirá la convención de investidura del candidato republicano en Cleveland (Ohio), en julio.

La reconciliación tomará tiempo. En diciembre, cuando Trump propuso cerrar las fronteras de EE. UU. a los musulmanes, Ryan lo condenó. “De eso no se trata el conservadurismo”, declaró. AFP