Artista. La poeta guayaquileña Karina Gálvez conversó con este Diario antes de su viaje cultural.

Portena lleva a Bulgaria su ‘Epicentro’ poetico

Karina lee en voz alta: “Oro porque el único dolor que sintamos sea el de parir un hijo sano...”. Una mujer, que comparte con ella escenario, repite los versos de su poema en búlgaro. Es la mañana del 17 de octubre. La guayaquileña recita en el auditor

Karina lee en voz alta: “Oro porque el único dolor que sintamos sea el de parir un hijo sano...”. Una mujer, que comparte con ella escenario, repite los versos de su poema en búlgaro. Es la mañana del 17 de octubre. La guayaquileña recita en el auditorio del Instituto Cultural Húngaro, en Sofía, Bulgaria, adonde llegó para lanzar su poemario, ‘Epicentro’.

Esta protagonista de la cultura local, cantautora, escritora y presentadora de “Mesa de Análisis”, en el canal de la Universidad Católica, llegó al otro lado del continente invitada por gestores culturales que compartieron con ella el año pasado en un Congreso Mundial de Poesía que coordinó en la urbe.

Hablar, además de español, inglés, francés, alemán, italiano y portugués, le ha permitido representar a Ecuador y compartir su poesía en varios países e idiomas.

‘Epicentro’ se llama así en honor a las víctimas del terremoto de abril pasado y a propósito de un poema que escribió con ese nombre: “Hay que seguir adelante, / construyendo paso a paso. / Sostenme tú con tu abrazo / y así saldremos triunfantes”. El libro ve la luz gracias a la editorial Scalino, en dos idiomas: español y búlgaro.

Karina, que en 2011 fue nominada a la medalla internacional de la Paz y la Cultura Salvador Allende, en Chile, no solo visitará Bulgaria. Está previsto que complete la agenda en Praga (República Checa) y Bratislava (Eslovaquia), donde ofrecerá conversatorios y hablará de la literatura ecuatoriana.

Esa siempre fue la idea. Karina es una embajadora cultural. Antes de irse conversó con EXPRESO y explicó que pretendía llevar una muestra del arte de Ecuador. No es la primera vez que lo hace. Ha estado en congresos en México y Chile. Además, consta en antologías poéticas de Venezuela, Perú, Bolivia, Colombia, el Salvador, Estados Unidos, Canadá, Brasil, España, Inglaterra y hasta Siria, país para el que escribió ‘Mar hambriento’, que aborda la temática de los niños que mueren en el océano.

Este poema también consta en su nueva obra:
“¿Cuánto más hay que llorar, / cargando el hogar a cuestas / en esta década siniestra / que no parece acabar?”.

Así es la poesía de Gálvez. Lleva mucho de corte social y, por supuesto, de Ecuador, como este, al que tituló ‘Amor a la ecuatoriana’: Quiero que desayunes sobre mi Panecillo / Que entradita la noche / me embriagues con tu Zhumir; Que hagas vibrar mi ser / como lo hace un pasillo, / Me lleves al Chimborazo / y me hagas después dormir”.