La sola propuesta divide criterios. El Consejo de Participación Ciudadana transitorio considera incluir ‘pruebas de confianza’ para seleccionar al nuevo fiscal general del Estado. La realización de pruebas con polígrafo en el reglamento de selección de la autoridad, sin embargo, incomoda a varios sectores.

María Mercedes Cuesta, asambleísta guayaquileña por el movimiento FE, está en el bando de quienes se oponen. Ella considera que es “descabellado” que el candidato a fiscal general tenga que pasar por un detector de mentiras para demostrar su honorabilidad. Considera que eso debe estar claro antes de ser parte de una selección.

La legisladora reconoce, sin embargo, que la iniciativa es una respuesta ante los actos de corrupción que salpicaron a altos funcionarios del gobierno anterior. Cuesta piensa que deben buscarse otros mecanismos para garantizar que gente adecuada ocupe cargos de transparencia y control social.

Con ella coincide el asambleísta de SUMA, Héctor Muñoz. “Es una medida absolutamente innecesaria porque no garantiza nada. En algunos casos ese tipo de medidas han sido cuestionadas”, explicó.

Para Muñoz, las credenciales y la probidad pública deben ser suficientes para confiar en la honestidad de la máxima autoridad de la Fiscalía General.

En el otro extremo está el legislador de CREO, Héctor Yépez. Él considera que todos los funcionarios públicos deberían someterse a las pruebas de confianza. Afirma que esa postura le incluye a él y a sus colegas asambleístas. “El que nada debe, nada teme”, sentenció el político guayaquileño en conversación con EXPRESO.

Con él concuerda su coidearia de CREO, Ana Galarza. Ella señala que, en el escenario actual, el polígrafo es una herramienta útil para los funcionarios públicos a cargo del control y la fiscalización. Su implementación, dijo, podría resultar beneficiosa.

Desde el Partido Social Cristiano (PSC) también hay voces a favor. La asambleísta Paola Vintimilla cree que, tras las constantes denuncias de corrupción en el gobierno del expresidente Rafael Correa, cualquier proceso que ayude a contar con “personas probas y honestas para estos cargos tan importantes y de tanto poder sirven”.

El Consejo de Participación Ciudadana transitorio está de acuerdo con Vintimilla. Los integrantes del órgano analizan incorporar las pruebas del polígrafo para los cinco candidatos más opcionados para ocupar la Fiscalía General. El tema se definirá esta semana.

La experiencia mundial muestra, contrario a lo propuesto por el Consejo transitorio, que el polígrafo no es bien recibido por las autoridades estatales. En Honduras y Colombia, por ejemplo, se hicieron cuestionamientos por someter a detectores a los fiscales. En los dos países se aplicó la medida a medias.

En 2013, la Asociación de Fiscales de Honduras rechazó la intención de tomar pruebas de confianza. Argumentaron que se irrespeta sus derechos constitucionales.

El año pasado, en cambio, Colombia aplicó pruebas de polígrafo para sus fiscales y jueces ante los casos de corrupción.

La selección del fiscal general

Pruebas

El reglamento para la selección del fiscal general de la Nación incluye pruebas de conocimientos de Derecho.

Confianza

A más del polígrafo, las pruebas de confianza incluyen evaluaciones psicológicas y exámenes toxicológico y un análisis financiero.

Descalificación

Si se incluyen las pruebas de confianza, los candidatos que se nieguen a tomarlas serán eliminados del proceso de selección de fiscal general.

Oposición

Dentro del Consejo de Participación transitorio hay voces en contra de la propuesta que impulsa el presidente del organismo, Julio César Trujillo. Xavier Zavala, integrante del ente temporal, explicó que ese tipo de pruebas resultan denigrantes para los postulantes que aspiran a ser autoridad.