Plan municipal para la protección de bosques

Plan municipal para la proteccion de bosques

Este proyecto es parte de la Estrategia Ambiental Cantonal que elabora la Dirección de Ambiente municipal. Así lo dio a conocer su titular, Bolívar Coloma.

Para diciembre está prevista la contratación de una consultoría para control, vigilancia y restauración ecológica de dos áreas protegidas de la ciudad, que son administradas por la Municipalidad: bosque Cerro Paraíso y Bosqueira. Este proyecto es parte de la Estrategia Ambiental Cantonal que elabora la Dirección de Ambiente municipal. Así lo dio a conocer su titular, Bolívar Coloma.

Dentro de la estrategia ambiental, que aún toma forma, está el eje Gestión del Ecosistema en el que se encuentra hacer un inventario de los sitios de restauración y de las áreas protegidas que tiene el cantón, algunas están bajo el control del Ministerio de Ambiente y otras bajo la administración del Municipio, aclaró Coloma.

El proyecto que enmarca a los bosques protectores busca la conservación de la diversidad biológica a través de la gestión, conservación y monitoreo, replante y mantenimiento de áreas ya reforestadas.

Los dos bosques que serán intervenidos muestran dos matices y dos realidades distintas. Bosqueira, de 130 hectáreas de extensión, es un bosque protegido circundado por una estructura urbana establecida, junto a un conjunto residencial que tiene entre sus normas de convivencia y reglamento interno, construir dejando espacios para áreas verdes.

Mientras que el bosque protector Cerro Paraíso, de 299 ha, es un sitio que ha sufrido incendios forestales. “Precisamente por su ubicación”, dice Coloma. “No hay quién los atienda y está a expensas de la quema de basura, quema de llantas”, agrega. Y es contra esa situación con la que buscan lidiar, trabajando para ello con el Cuerpo de Bomberos, Ministerio de Ambiente y Fiscalía, asegura el director municipal.

Coloma indica a EXPRESO que este proyecto debería iniciar en febrero de 2017 y la consultora tendrá 210 días para su ejecución que incluye: mantenimiento, control, monitoreo, acompañado del fortalecimiento en la concienciación ambiental, charlas educativas y el empoderamiento de la ciudadanía a respetar y cuidar los espacios verdes.

Este plan va ligado a la implementación de corredores biológicos en el área urbana. Existe la posibilidad de que puedan unirse los dos malecones con este proyecto, un planteamiento ya expuesto por la facultad de Arquitectura de la Universidad de Guayaquil, y publicado por este Diario hace tres meses.

Según Coloma, el proyecto está en fase de socialización y debe incluir a la Dirección de Turismo, porque “la idea es que estas áreas reforestadas puedan ser parte de la oferta turística sostenible de la ciudad. Se está estudiando la posibilidad de hacer un recorrido para integrar los espacios urbanos y los bosques”, dijo Coloma. Para ello se debe estudiar la factibilidad técnica, ambiental y económica, agregó.