Un grupo de personas, aparentemente indígenas de la etnia shuar, atacaron las instalaciones de la empresa minera china Explorcobres S.A. (EXSA).

Pekin muestra su preocupacion por ataques contra la minera china en Ecuador

Ya se identificó a indígenas shuar en otro altercado denunciado el pasado 21 de noviembre contra las instalaciones de EXSA.

El Gobierno de China expresó este 16 de diciembre su preocupación por los ataques de grupos indígenas contra la empresa minera china Explorcobres S.A. (EXSA) en el sureste de Ecuador, entre ellos el que el pasado 14 de diciembre acabó con la vida de un policía y dejó a otros siete agentes heridos. El portavoz del Ministerio de Asuntos Exteriores chino, Geng Shuang, explicó en una rueda de prensa que el Ejecutivo del gigante asiático está “sumamente preocupado” por los hechos, ocurridos en la provincia de Morona Santiago.

Asimismo, Geng expresó su “agradecimiento” por las “acciones inmediatas” del Gobierno ecuatoriano para “controlar la situación”, e indicó que China y Ecuador “mantienen comunicaciones” acerca de la situación. En el ataque más reciente, un grupo de personas, aparentemente indígenas de la etnia shuar, atacaron las instalaciones de la empresa minera china Explorcobres S.A. (EXSA).

Esta no es la primera vez que la concesionaria china recibe ataques en la zona. Ya se identificó a indígenas shuar en otro altercado denunciado el pasado 21 de noviembre contra las instalaciones de EXSA.

Los grupos nativos de esa zona se oponen a las actividades extractivas y exigen la salida de las empresas mineras de sus territorios. Legalmente, la compañía china es concesionaria para la explotación de minerales, especialmente cobre.

El Gobierno de Ecuador desplazó el jueves 15 de diciembre a militares y policías a la zona minera en la Amazonía. Rafael Correa declaró estado de emergencia por 30 días en la provincia amazónica donde opera EXSA.

El Gobierno calificó el incidente como un “ataque inesperado por parte de un grupo armado ilegal” contra el campamento minero La Esperanza, en tanto, comunidades indígenas aseguran que desde hace meses fueron desalojadas de sus territorios ancestrales para permitir la operación de la minera. El estado de emergencia suspende derechos como la libertad de tránsito, entre otros.

En Pekín, el portavoz del Ministerio de Relaciones Exteriores dijo que “China está dispuesta a trabajar con Ecuador para tomar medidas efectivas para crear un buen ambiente para la cooperación bilateral”. La Confederación de Nacionalidades Indígenas de Ecuador (CONAIE) solicitó la mediación de organismos internacionales y la Iglesia Católica para solucionar el conflicto en la zona minera.

“La empresa minera china Exsa se asentó desalojando a la comunidad Shuar, lo que avivó resistencia en contra de la minería (...) No son ningunos invasores”, dijo el presidente de la CONAIE, Jorge Herrera. Movimientos indígenas y ecologistas se oponen al desarrollo de proyectos mineros y petroleros, argumentando un grave impacto ambiental.