Situación. El edificio de la nueva terminal está ubicado en el kilómetro 3,5 de la vía Milagro-Virgen de Fátima.

Una obra se pierde entre la maleza y la discordia

Una vez que se dé por terminada la parte legal, se llamará a un concurso donde la empresa privada podrá participar para trabajar en la culminación de la obra.

En medio de la maleza que ha crecido en varios de los espacios internos y externos del edificio de la nueva terminal terrestre de Milagro, Gerardo Góngora se abría paso y rememoraba cuando fue parte de los jornaleros de la construcción. La obra inicialmente debía estar lista para el 2014, pero actualmente luce inconclusa.

Hace más de un año los trabajos se paralizaron y Gerardo es quien cuida el lugar. En las guardias se ha encontrado con algunas culebras, también ha tenido que expulsar a individuos que rondan el sitio.

En febrero pasado, la alcaldesa del cantón, Denisse Robles, mediante rueda de prensa recordó que la empresa constructora Etinar fue notificada en el 2015 de un supuesto “incumplimiento” en los plazos establecidos de la obra, la cual fue contratada en la anterior administración del ahora exalcalde, Francisco Asán.

La alcaldesa cuestionó el parentesco de consuegros que existe entre Asán y José Macchiavello, este último presidente de Etinar, quien rechazó lo expresado por Robles al aclarar que su empresa se hizo cargo de la obra a través de un concurso en el que fueron la única empresa en presentarse.

Etinar actualmente mantiene una demanda en contra del Municipio de Milagro en la que exige la devolución del dinero hasta ahora invertido en la construcción del edificio. Macchiavello argumentó que el origen de la demanda fue la falta de “seguridad jurídica” en la que se vieron como empresa.

El titular de Etinar opinó que Robles estuvo “mal asesorada” al no aceptar una prórroga de plazo que solicitó en su momento el fiscalizador de la obra “de manera justificada”. “Ella desconoció esa prórroga (...) y ahí fue cuando nosotros nos sentimos desprotegidos judicialmente”, sostuvo.

Por su parte, Miguel Romero, procurador síndico municipal, dijo que “ellos (Etinar) lo que han hecho es presentar una demanda al Tribunal Contencioso Administrativo (...). Serán los jueces quienes determinen si hubo o no incumplimiento”.

El exalcalde acotó que “las obras son de la comunidad, no del que las contrata... Si esta administración (la de Robles) se hubiera preocupado de normalizar el atraso del tiempo por el incumplimiento, ya hubieran inaugurado la obra”.