Elecciones. Alejandro Domínguez ocupaba el cargo interino en el organismo por Napout. Ayer en los sufragios fue respaldado.

Las nuevas leyes acumulan reformas

Calidad. Esta Asamblea quedará registrada en la historia por el número de leyes que ha votado. Tiene el récord de la mayor cifra de normativas aprobadas: 40 en dos años y 36 programadas para este 2016. Esto suma un total de 76. La producción de leyes ha sido muy eficiente, “nunca antes una Asamblea había aprobado tantas normas ni de tanta envergadura”, reconoció a este Diario el legislador del Partido Social Cristiano-Movimiento Cambio, Luis Fernando Torres. Según él, si bien la productividad parlamentaria no tiene precedentes, la calidad es baja. Así, la calidad de las normas votadas tiene relación con su corrección. Algunas de estas no cumplieron ni un año y se reformaron. Otras lograron sobrevivir tres años, pero ya se anuncian cambios en sus artículos. Algunas incluso van por su segunda o tercera modificación. Por ejemplo, el Código Orgánico Integral Penal (COIP) se aprobó en una sesión de trabajo, de 09:00 a 24:00. Pero, al mes de su estreno, el presidente de la República hizo la primera reforma. Ahora, ya está en la tercera modificación. Para Miguel Ángel Moreta, legislador de CREO e integrante de la Comisión de Justicia, en estos dos últimos períodos parlamentarios se privilegió la cantidad y no la calidad en la aprobación de proyectos. Pero “no la cantidad por autonomía, sino sumisa. De los 15 proyectos aprobados, 12 son del Ejecutivo y solo tres de la bancada oficialista. La oposición presentó 64 y pasó solo una”, dijo a EXPRESO. A criterio de los consultados, en este tema hay dos problemas: el primero es la formación de los colegas. “No tienen el perfil ni la preparación. En las comisiones se dedican a chatear y revisar las redes sociales. No trabajan ni aportan en nada”, agregó Moreta. El segundo es que el oficialismo aprueba las leyes en plancha y así no es posible mejorar la calidad de los documentos ni recoger las observaciones. “Los técnicos deben escribir las leyes y los legisladores deben debatirlas”, señaló este abogado-legislador. Pero, ¿cómo explicarle a la ciudadanía el porqué de tanta construcción y cambio de normas? Para el oficialismo, la Asamblea tiene un saldo positivo en la aprobación de leyes. Pero se requiere mayor debate con las organizaciones sociales, subrayó a este Diario la legisladora por la provincia de Imbabura y doctora en Leyes, Marisol Peñafiel. Por ejemplo, el Código Civil, herencia Código Romano, se reformó y reconoció los derechos de las mujeres, de los niños y adolescentes, de la comunidad y la diversidad sexual. Según ella, en el Código de la Niñez establece la detención por no pagar las pensiones alimenticias a los niños. Pero eso se modificará por pedido del primer mandatario y de la ciudadanía. “No lo comparto, es un tema de responsabilidad. No concibo que las mujeres tengan hijos para hacer negocio o traten de vengarse de sus exmaridos”. Sin embargo, la socialcristiana, Cristina Reyes, aseguró que las leyes del oficialismo son “funcionales al Gobierno, la bancada no tiene agenda política propia y la ciudadanía cuestiona esta situación. Eso se evidencia en las encuestas de credibilidad”. Comunicación Hay varios proyectos en marcha Ha vivido poco, pero ya se cambiará. La polémica Ley Orgánica de Comunicación (LOC) está en la programación para la reforma. La Superintendencia de Comunicación “tiene modificaciones para asfixiar a los medios y perseguir a los periodistas”, advierte la oposición. La LOC impuso sanciones pecuniarias por cientos de miles de dólares a varios medios de comunicación.