Boards

Musica por Ecuador

En las instalaciones de Fediscos, 13 bandas independientes se reunieron con la finalidad de recaudar kits para los damnificados por el terremoto.

Pudo ser una tarde de sábado común en Guayaquil: calurosa, húmeda e interminable. Los últimos tres adjetivos estuvieron presentes, pero no fue tan normal. La música se manifestó por casi doce horas y la juventud se reunió para gozarla. El calor, sin dudas, es parte de la ciudad y se hizo notar durante todo el festival Música por Ecuador. Allí la multitud que se agolpó en el patio de Fediscos aguantó sol, pero disfrutó de buenos shows. Para refrescarse bebían agua, y alguno que otro tomaba a pico de una botella de cerveza infiltrada.

Fueron 13 bandas de la escena indie guayaca que reunieron sus talentos para colaborar con los damnificados por el terremoto en el noroeste del país. En festivales anteriores la entrada era cobrada. Esta vez un kit de donativos, con lo esencial para quienes lo perdieron todo en Manabí y Esmeraldas, era lo que dejaba el paso libre a los asistentes.

Fue común ver a quienes pretendían entrar, cruzar desde el centro comercial que queda al frente del recinto con fundas llenas de productos del supermercado.

Las presentaciones iniciaron puntuales. A las 12:40 subió al escenario el trío Don Barbas, los más nuevos de la lista de artistas. Con ellos arrancó el espectáculo que intercalaba los nombres más representativos de los artistas independientes con los más novatos. Así le presidieron André Farrá y el reencuentro de Cadáver exquisito.

El vocalista de esta banda, Daniel Vinueza, fue uno de los organizadores del evento que nació desde el Movimiento Independiente de Artistas Unidos (MIAU).

El sol iba cayendo y cada agrupación subía a la tarima con dos premisas: agradecer por la ayuda brindada y de poner a disfrutar al público. Los ritmos que se escucharon fueron variados, post punk, surf rock e indie pop, aunque distintos no hubo asistente que no ladeara la cabeza con cada presentación.

General Villamil, Abbacook, Dome Palma hicieron lo suyo. No fue hasta entrada la noche que el festival se llenó de color, apoyándose en la oscuridad que llegaba y los juegos de luces sobre el escenario. La última tanda de músicos avivó la energía. Los Boards supieron atraer a la gente que se había tomado un descanso y comía algún snack. Los Merchán, más cancheros, agradecieron a los más de mil presentes por sus donaciones, por el apoyo recibido y el respaldo a su música. También confirmaron que se había superado el millar de donaciones. No faltó la cuña de la venta de sus discos en un kiosko cercano, junto al de Don Barbas. El sonido más pesado llegó con las guitarras de Vírgenes violadoras, punk ultraconocido por quienes decidieron hacer mosh al pie de la tarima.

Brazos en lo alto, palmas con ritmo, y cuerpos danzantes fue lo que acompañó a Ricardo Pita en su performance y que con su tema ‘La vida es buena’ invitó a los miembros de la bandas amigas a cantar.

El cierre de Música por Ecuador estuvo de la mano de Los Corrientes, quienes con su tema ‘Salsa para partirte las tapas’ hicieron gozar a los melómanos. La iniciativa logró más de 3.000 artículos donados y 1.020 kits ideales, los cuales fueron entregados a la fundación Kahre. La noche no acabó ahí, antes por dar concluido el evento se pidió a quienes tuvieran una videograbadora a que suban al escenario para captar la energía que al unísono desprendieron todos con un grito de ¡Fuerza Ecuador!