
Un millonario y un expresidente compiten por desplazar a la izquierda en Bolivia
Dos décadas de hegemonía izquierdista podrían terminar con Doria o Quiroga. Ambos prometen un giro económico ante la crisis
Uno es un expresidente y el otro un millonario. Entre estos dos perfiles estará muy probablemente el nuevo mandatario de Bolivia. Cualquiera pondrá fin a dos décadas de gobiernos de izquierda que terminan con una grave crisis económica.
El millonario Samuel Doria Medina y el exmandatario Jorge Quiroga (2001-2002) encabezan las encuestas que predicen una segunda vuelta entre ambos opositores de derecha el 19 de octubre de 2025.
Ambos capitalizarán el rechazo del electorado al mandatario Luis Arce y al líder indígena Evo Morales, quien ejerció el poder entre 2006 y 2019.
La principal carta de la izquierda es el presidente del Senado Andrónico Rodríguez, pero quien marcha muy rezagado de los punteros.
Desde 2005, el oficialista Movimiento al Socialismo (MAS) ganó todas las elecciones en las que participó en primera vuelta con más del 50% de los votos.
¿Quiénes son los aspirantes que desafían hoy su hegemonía?
Un millonario sobreviviente
Samuel Doria Medina, empresario paceño de 66 años que se define como socialdemócrata, participó sin éxito en tres elecciones presidenciales durante los últimos 20 años.
En este cuarto intento, acude con la coalición Alianza Unidad.
Lidera la última encuesta de Ipsos-Ciesmori con 21,2% de las preferencias.
"Vengo de una familia humilde (...), mi padre tuvo que dejar el colegio a los 14 años", dijo en una reciente entrevista con la AFP.
Por décadas hizo fortuna con Soboce, una compañía de cemento que su grupo familiar vendió en 2014 por 300 millones de dólares. Ahora es propietario de la franquicia de Burger King en Bolivia e invierte en el rubro hotelero.
Estuvo secuestrado 45 días por la guerrilla peruana del MRTA en 1995 y fue liberado tras el pago de un millonario rescate, cuyo monto nunca fue revelado. Luego, en 2005 sufrió un accidente aéreo en la región andina de Oruro.
Plantea renegociar créditos internacionales y eliminar el subsidio a los combustibles, una política que agota los dólares del país, genera largas colas en las gasolineras y es considerada la principal causa de la crisis.
Su eslogan es "¡100 días, carajo!". "Nosotros hemos planteado que en 100 días van a volver los dólares y la gasolina y el diésel", asegura.
El Tribunal Constitucional Plurinacional de Bolivia anuncia un fallo que establece la "obligatoriedad de la paridad de género en las candidaturas a la Presidencia y Vicepresidencia" a partir de las elecciones generales del 2030.https://t.co/UngPSN4IUt
— EFE Noticias (@EFEnoticias) August 11, 2025
Heredero de un exdictador
Jorge Quiroga es un ingeniero de 65 años, graduado en la Universidad A&M de Texas, exempleado de la multinacional estadounidense IBM y hoy candidato de la alianza política Libre.
Más conocido como "Tuto", apodo que agregó a su nombre oficial, fue vicepresidente del militar Hugo Banzer, un exdictador que a fines de los 1990 alcanzó la presidencia por la vía democrática. Lo reemplazó luego de su renuncia por cáncer en 2001 y 2002.
Buscó también la presidencia en 2005 y 2015, pero nunca tuvo tantas posibilidades como ahora. Ipsos-Ciesmori le da un segundo lugar con 20% a una semana de los comicios.
Se denomina liberal, pero también atrae los votos más conservadores.
"Me voy a dedicar a salvar la economía de Bolivia, a traer inversiones, a abrir mercados. Voy a hacer acuerdos de libre comercio con China, con Corea, con Japón, con Europa", dijo a la AFP.
Promete un "cambio sísmico": bajar el déficit fiscal, reducir el Estado, privatizar todas las empresas públicas deficitarias e impulsar una nueva Constitución con giros "radicales".
Un cocalero rezagado
Andrónico Rodríguez, presidente del Senado de 36 años, llegó a la política boliviana en 2020 de la mano de Evo Morales y de Arce.
Luego de que ambos líderes se enfrascaran en una áspera disputa y rompieran la unidad del partido de gobierno, este politólogo y dirigente sindical de los cocaleros fue visto como una posible tercera vía de consenso para la izquierda.
Pero aunque en las primeras encuestas figuraba a la cabeza de la intención de voto, su popularidad se fue reduciendo hasta hoy. Ipsos-Ciesmori lo pone en quinto lugar con un 5,5%.
Para postular tuvo que romper con su mentor político Morales, que también aspiraba a un nuevo mandato hasta que fue inhabilitado, y con el MAS de Arce.
"Represento a una nueva generación", dijo en un reciente debate televisado.
¿Quieres acceder a todo el contenido de calidad sin límites? ¡SUSCRÍBETE AQUÍ!