Mateo Kingman: el que cree y canta...
‘Astro’ es el segundo álbum del artista local. Con este trabajo profundiza en sus emociones.
El cantante ecuatoriano Mateo Kingman conversó con EXPRESIONES desde Quito, en la víspera de su viaje a Europa, donde se presentará en pocas fechas como solista y también con su proyecto paralelo EVHA.
Aunque nació en Macas, provincia de Morona Santiago, su pueblo es el mundo y lo deja plasmado en su música y en sus viajes. Es en el Viejo Continente que encontró un público ávido de su experimentación sonora, y ahora con su nuevo disco Astro, que se estrenará el 26 de julio, quiere dar a conocer un nuevo mundo interior, más profundo.
¿Qué tal eso de andar en avión todo el año?
Es más o menos así (risas). Espero que el próximo sí sea así. Está increíble poder viajar y compartir mi música. Nunca sabes lo que va a pasar con la reacción de la gente y no sé, es una sensación de vértigo constante. A la vez, es muy ‘llenadora’. Y creo que para eso creamos los músicos, para luego poder compartir y vibrar en estas frecuencias con gente nueva. Y poder conocer esos países, y viajar por ellos es parte de este lindo proceso.
Dice que nunca sabe lo que puede pasar, pero cuando no salen las cosas como lo tiene planeado, ¿cómo lo toma arriba en el escenario?
Antes intentaba que la gente se conecte como sea. Y me sacaba el aire para que la gente se conecte, para dar un show energético y que haya una reacción del público. Me he dado más cuenta de que es uno el que debe estar bien conectado con su música y uno debe estar en estado de disfrute y profundidad para que todos puedan sentir lo mismo. Todo está en eso.
¿Cómo cree que ha cambiado la percepción de su música?, ¿va dirigida a un público específico?
Me parece que ya no tengo un nicho específico. Creo que estamos convirtiendo este proyecto en música del mundo, siempre con colores contemporáneos. Ahora hay mucho urbano, trap. Pero mi sencillo Último aliento no creo que sea para una edad. Es un tema con el que puede vibrar mi papá, que tiene 65 años, o un ‘pelado’ de colegio de 15.
¿A sus 27 años cree que ha alcanzado una madurez personal y musical?
Siento que este álbum tiene que ver justo con esta etapa de mi vida. Es el paso de la juventud hacia la adultez. Siento que ha sido necesario hacer este álbum para eso. Quizá uno deba hacerse ‘grande’ antes, pero recién estoy en este proceso y a través de la música hice este espacio muy profundo.
Último aliento, junto a Gustavo Santaolalla
El acercamiento entre Mateo Kingman y el compositor Gustavo Santaolalla se produjo en 2017 en Ciudad de México. Así, al escuchar su música encontraron una gran cercanía, por lo que cuando el argentino visita Quito es Mateo quien abre su show.
Último aliento es el tema que ahora promocionan, y que se dio al principio sin saber si solo sería como productor o como cantante. “Se siente como un sueño, para mí, que este maestro de la música sea ahora un hermano y tripulante de esta nave. Hice esta canción en el río San Pedro, en el tiempo en que mi abuelo estaba muriendo”, explicó.
El vídeo fue grabado en Argentina y fue dirigido por Ana Barragán y Simón Brauer.
¿De qué se trata Astro?
Así describe lo que transmite este trabajo musical, que tendrá 11 temas y estrenará el 26 de julio: “Es una exploración de tu interior, de tus miedos, alegrías, dudas. El disco entero es un enfrentamiento constante con todo esto. Tejidos, que fue el primer sencillo, corresponde al tiempo más cósmico. Creo que hay una parte de nuestro viaje en el que te das cuenta de que no eres nada y todos estos viajes son portales que se dan para llegar a una adultez”.
Inicia la gira
Ahora se encuentra en Europa en una pequeña gira de 10 días. Pero oficialmente la presentación del disco por el Viejo Continente será en septiembre. Visitará España, Dinamarca, Francia Portugal y Holanda. A Ecuador regresará en agosto y tocará su nuevo show en Guayaquil el 31 de ese mes, en el festival Wanka Beats.
También dijo:
- “La identidad y la espiritualidad van de la mano”.
- “No tengo algo que quiera con mucho deseo en este plano terrenal. Puede ser traspasar más con mi música. Pero los músicos somos un puente”.
- “No creo en los discursos basados en la razón. Creo más en lo que me dice la energía, los sentimientos”.
- “Creo en el espacio y en que hay vida en otros planetas”.