Alrededor de 400 personas, entre hinchas, futbolistas y dirigentes del Delfín, realizaron una procesión desde el estadio Jocay de Manta hasta el santuario de la Virgen de Monserrate en Montecristi, cumpliendo así un ofrecimiento realizado por José Delgado, presidente del club, a la santísima.

En el recorrido solo estuvieron presentes los jugadores Francisco Silva, Carlos Garcés y Luis Luna, quienes encabezaron la caminata junto al titular del equipo cetáceo.

Durante el trayecto de 13 kilómetros, desde una camioneta se repartió agua a los participantes, quienes con cánticos religiosos y de las barras animaban la peregrinación.

En el límite entre Manta y Montecristi, específicamente en el sector La Tejedora, los integrantes de una banda de pueblo detuvieron la marcha para dar la bienvenida a los feligreses, quienes durante 15 minutos bailaron al ritmo de las alegres tonadas.

“Como ciudadano montecristense, con este gesto damos la bienvenida a este equipo, a su dirigencia e hinchas. Es nuestra forma de agradecer por la alegría que nos dieron al ganar la primera etapa del campeonato ecuatoriano de fútbol”, dijo Juan Armendáriz, uno de los anfitriones.

Respeto a las religiones

A la marcha solo asistieron tres jugadores del primer plantel (Francisco Silva, Carlos Garcés y Luis Luna). El resto de la plantilla del Delfín practica religiones diferentes a la católica, por lo que se optó por respetar todas las creencias.

Junto a los devotos, se sumaron alrededor de 40 vehículos. La presencia de los agentes de tránsito y Policía Nacional permitió que todo sea en orden.