El tallo de plátano se constituye en materia prima para la elaboración de artesanías en La Maná, sector costeño de la provincia de Cotopaxi.

Sombreros, gorras, bisutería, cinturones, carteras, tapetes, forros de botellas, carpetas, portarretratos, diademas, centros de mesa, apliques y hasta cuadros se puede confeccionar con este elemento vegetal, más conocido como chanta.

En la parroquia El Carmen, un grupo de artesanas denominado Amistad se dedica a elaborar estas artesanías y las presentan en ferias para que sean conocidas. La elaboración de estos artículos ha generado el interés de propios y extraños.

El tallo del plátano se consigue en las bananeras de la zona, puede ser de guineo o de plátano (verde).

El procedimiento para la elaboración de estas artesanías comienza al conseguir el tallo en estado ‘jecho’, es decir cuando se encuentra semimaduro, luego se sacan las dos primeras capas duras de color rojizo y cuando las capas blancas suaves aparecen se extraen de varios centímetros y se las pone a secar al sol por ocho días.

Una vez secas se cortan en tiras, luego se selecciona el material y una vez listo se comienza a entrelazar las tiras con las manos, dependiendo de lo que se desee confeccionar.

Se pueden obtener una variedad de productos ya mencionados y hasta muebles si es que se desea. Su contextura es muy parecida a la paja toquilla. (F) (YGV)