Actos. Macron con Donald y Melania Trump en los Campos Elíseos, durante la parada por el Día de la Bastilla.

Macron apuntala la alianza con Trump

Alfombra roja en París a un presidente en problemas. La lucha antiterrorista centró la visita. Niza evoca un año de la masacre.

El presidente estadounidense Donald Trump y el francés Emmanuel Macron asistieron juntos ayer en París al tradicional desfile militar del 14 de julio, poniendo el broche final a una visita que selló una alianza que “nada separará jamás”.

Trump fue el invitado de honor de las fastuosas celebraciones por la fiesta nacional francesa, que este año conmemoraron también el centenario de la entrada de EE. UU. en la I Guerra Mundial. En honor a este aniversario, los ‘Sammies’ -el nombre con el que se designaba a los soldados estadounidenses en referencia al ‘Tío Sam’- abrieron el desfile en el que participaron 3.720 militares, 211 vehículos, 241 caballos, 63 aviones y 29 helicópteros.

Francia ha encontrado a lo largo de su historia “aliados sólidos, amigos que vinieron a auxiliarnos” y “Estados Unidos figura entre ellos, es por eso que nada nos separará jamás”, dijo Macron, junto a Trump, en un discurso al cierre del desfile.

“Fue un gran honor representar a Estados Unidos en el magnífico desfile de #BastilleDay”, tuiteó Trump al cierre de una visita a Francia de dos días, antes de tomar un avión de regreso a Washington.

En momentos en que Trump se encuentra aislado en la escena internacional, Macron le extendió la alfombra roja. A pesar de sus diferencias sobre la lucha contra el cambio climático y el comercio, los dos líderes se centraron en su estrecha cooperación en la lucha contra el grupo yihadista Estado Islámico (EI) en Siria e Irak durante su encuentro.

Las celebraciones estuvieron también teñidas de duelo. Macron viajó en la tarde a Niza para los actos del primer aniversario del atentado en el que un extremista tunecino, en nombre del EI, embistió a personas que celebraban la fiesta nacional. En menos de tres minutos, 86 personas, incluidos 15 niños, murieron arrollados y otras 450 resultaron heridas.

Más de 130.000 efectivos de seguridad y socorro fueron desplegados en todo el territorio para velar por la seguridad pública durante las conmemoraciones del 14 de julio.

El eterno apretón de manos

Muy efusivo fue el nuevo apretón de manos entre Trump y Macron en París. Veintiocho segundos, casi medio minuto en el que ambos posaron para las cámaras con un gesto que bien podría ser el de dos boxeadores antes de subirse al ring. Un saludo que tuvo su precedente en el encuentro que ambos protagonizaron en mayo en Bruselas, en el que Macron afirmó que su tenso apretón de manos “no era inocente”. Pero ese duró solo cinco segundos.

La escena de ayer comienza con las dos palmaditas condescendientes de Trump al francés. Sin soltarle la mano, echan a andar en una difícil postura, que se complica aún más cuando el americano desequilibra ligeramente al francés. Después de unos pasos, Trump propina pequeños golpecitos en los brazos, pecho y hombro a un visiblemente incómodo Macron.

Trump suele saludar así, como en un acto de fuerza. En febrero, el apretón con el premier de Japón, Shinzo Abe - junto con la animada reacción del líder japonés - se hizo viral.