Simpatizantes. Lula da Silva saluda a sus partidarios después de dar una conferencia en días pasados.

Lula es acusado de trafico de influencias en Angola

Los cargos por corrupción contra el expresidente de Brasil Luiz Inácio Lula da Silva aumentaron el lunes, después de que fiscales lo acusaron a él y al empresario Marcelo Odebrecht, ex presidente ejecutivo del grupo de ingeniería Odebrecht SA, de un su

Los cargos por corrupción contra el expresidente de Brasil Luiz Inácio Lula da Silva aumentaron el lunes, después de que fiscales lo acusaron a él y al empresario Marcelo Odebrecht, ex presidente ejecutivo del grupo de ingeniería Odebrecht SA, de un supuesto esquema de corrupción vinculado a contratos en Angola.

Lula ya se enfrenta a otras acusaciones en relación a una amplia investigación sobre sobornos en Petrobras, mientras que Odebrecht cumple una condena de 19 años debido a otros casos de corrupción dentro de la misma pesquisa.

Los nuevos cargos se conocen en medio de expectativas de que Odebrecht, el mayor conglomerado de construcción de América Latina, está cerca de firmar un acuerdo de indulgencia con fiscales que convertiría a su ex presidente ejecutivo y a decenas de ejecutivos en testigos del Estado.

Los fiscales han dicho que el grupo, de alcance global y fuertes conexiones dentro de Brasil, estaba en el centro de un esquema de corrupción que duró un largo tiempo. Los testimonios de sus ejecutivos podrían ampliar la investigación, generando más pesquisas e implicando a más políticos.

El fiscal general del país, Rodrigo Janot, investiga a 66 políticos (muchos de ellos legisladores) por su presunta participación en el esquema de Petrobras, una cifra que podría crecer significativamente con el posible testimonio de los ejecutivos de Odebrecht.

Los fiscales dijeron que el expresidente usó su influencia para asegurar financiamiento del Bndes hacia proyectos de Odebrecht en Angola. A cambio, el grupo de ingeniería habría entregado 30 millones de reales (9,31 millones de dólares) en sobornos.

Las autoridades afirmaron en su comunicado que analizan otros proyectos de Odebrecht en África y América Latina para ver si la compañía recibió préstamos de parte del Bndes con bajos intereses de la misma manera que el supuesto esquema en Angola.

El exmandatario es acusado de cargos que incluyen corrupción, tráfico de influencias y lavado de dinero. Este último, según los fiscales, fue encontrado en 44 oportunidades, a menudo a través de un pago de Odebrecht con precios inflados al subcontratista Exergia Brasil, que era dirigido por alguien cercano a Lula y quien también enfrenta cargos en el caso.

Ahora depende de un juez federal en Brasilia el aceptar o no los cargos contra Lula y las otras personas y decidir si eleva las causas a juicio.