Es madre soltera y tiene 28 años.

Leisy Molina

“Haber ganado elevó mi autoestima”

Es un referente para las madres solteras y amas de casa. Leisy Molina, de 28 años, es la Señora Ecuador 2016, y nos representará en China en el certamen internacional, donde competirá con 79 países, el 10 de septiembre.

Haciendo una pausa a su preparación, que incluye dicción, expresión corporal, pasarela, maquillaje y cultura general de la Mitad del Mundo, se tomó un tiempo para conversar con EXPRESIONES. A pesar de tener un título nacional de belleza, especificó que su fuerte no es el modelaje.

Su hobby no es pasear con sus amigos ni escuchar música. La debilidad de Leisy es su hijo Mathias Wila, de 7 años, a quien llama “mi negrito”. Todo su tiempo libre se lo dedica a él.

Usted es la segunda señora que representará a Ecuador, ¿qué consejo le daría a las mujeres que se sienten poco agraciadas como para participar en un concurso?

La belleza depende mucho de la actitud. Fui una mujer con muchos temores, pero el haber ganado este concurso elevó mi autoestima.

Hablando de autoestima, ¿qué dijo su exesposo de su triunfo?

Nada, solo me felicitó...

Y con el ego de reina, ¿usted qué le dijo?

Cual Lázaro, ‘mira lo que te perdiste’ (risas).

¿Qué la llevó a competir por la corona de Señora Ecuador?

Era un sueño pendiente y me saqué la pica. Dios me concedió el anhelo de mi corazón.

Es la primera vez que participa en un certamen de belleza, ¿qué aprendió?

A confiar en Dios, en mí y a ser perseverante. El proceso del certamen no fue nada fácil.

¿Qué actividades hacía antes y ahora con una corona no se atreve a hacer?

Nada, sigo siendo la misma. Salgo sin maquillaje a la calle.

¿Cómo se divide en sus roles de madre y soberana?

Es estresante, pero lo disfruto. Vivo sola con mi hijo y a veces tengo que dividirme en tres. Como mamá soy equitativa; mitad amor y mitad rigor.

La sociedad define como ‘fracaso’ cuando una pareja rompe su matrimonio, ¿todavía cree en el amor?

Creo en el amor de Dios y el hombre. Me daría otra oportunidad, no todos los hombres son iguales.