Sobre “Supremacismo” antiindigena
Con el título del epígrafe se escribió en Diario EXPRESO, entre otras opiniones, que en América Latina “...se están revelando algo más profundo y grave: la existencia de un mal encubierto racismo antiindígena...”.
En su nota, la autora, tratando de reforzar la idea de que existe racismo, hace referencia al problema que se ha presentado en Bolivia a propósito de la dudosa declaración de triunfo de Evo Morales, y en forma algo profética, se pregunta si el odio racista podría empezar una guerra civil en ese país.
Por las informaciones que periódica y objetivamente viene haciendo el mencionado Diario, los lectores imparcialmente hemos podido establecer que nada ni nadie puede justificar la interrupción del conteo de votos por 22 horas y que luego, por magia de birlibirloque, los resultados dieran una ventaja asombrosa al presunto triunfador, cuando antes de las 22 horas dichos resultados conducían inexorablemente a una segunda vuelta.
De manera que aquí no se trata de actuar con odio racista, sino de que el voto, que es sagrado, debe respetarse porque esa es la soberana voluntad de un pueblo que quiere decidir su futuro; puesto que ese voto fue irrespetado por algunas funciones del Estado, tanto en las elecciones presidenciales como cuando mediante referéndum se impuso el NO para que no exista reelección. Por tanto, considero que no será necesaria una guerra civil; simplemente, que la OEA cumpla con su misión, que es la de preservar la democracia, a pesar de la minada credibilidad que tiene este organismo.
Lamentable es que en el artículo no se haga mención de la extraña interrupción del conteo de votos. Quizás hubiera ayudado a los lectores a entender más la problemática originada por esta situación.
Ec. Ángel Campoverde Giler