“Ojala que la indignacion ciudadana no traspase los limites del respeto”

Ante lo que estamos observando, y lo digo sumido en la esperanza, que los que leen esta opinión compartan mis preocupaciones sobre el ambiente político nada tranquilizante que estamos viviendo, como amenazante nube gris, posada en nuestro querido Ecuador. Y que no solo nos preocupe, sino que intentemos que rayos de luz se abran paso entre esa nube de malos presagios. ¿Hasta dónde pensamos llegar en este desbocado torbellino de ambiciones malsanas de los políticos, corrupción, impunidad y prejuicios, que la cercanía del proceso electoral del 2019 agudiza aún más.

Señor Director, en estos momentos no parece prioridad para nuestra clase política tomar posiciones ante el desbarajuste en el sistema de justicia, la magnitud de la corrupción con recursos del Estado, pobreza, desigualdad social, criminalidad, narcotráfico, impunidad y otras lacras sociales que nos azotan. Y esto lo aprovechan los inescrupulosos. Ojalá que el buen juicio, la sensatez, el deseo de un país en paz nos haga entender que defender nuestros derechos y principios se puede y se debe hacer, sin traspasar los límites del respeto y la tolerancia. No lo estamos haciendo, estamos jugando con fuego. ¡Pienso que muchos compartimos estas preocupaciones!

Eco. Mario Vargas Ochoa