Juez se blinda en caso Espinel

Las dilaciones que se han presentado en el proceso que se sigue en contra del exministro Iván Espinel Molina, por presunto enriquecimiento ilícito, llegarían a su fin.

Al menos eso intentará el juez de Garantías Penales de Guayaquil, Jorge Alexander Martínez Olivares, quien asumió el despacho de su colega Yesenia Hidalgo Ordóñez, suspendida noventa días por el Consejo de la Judicatura (CJ), tras declarar fallida la audiencia de evaluación y preparatoria de juicio, que convocó el pasado 24 de septiembre, dentro de ese proceso. La jueza tomó esa decisión al conocer, verbalmente ese día, de una demanda de recusación que presentó el procesado a través de sus abogados; quienes, días atrás, también le pidieron que se excuse por haber conocido previamente ese caso, lo que fue negado. El juez Jorge Guzmán, quien actuó en esa causa antes de Hidalgo, también fue suspendido.

Con ese antecedente, y, tomando en consideración los múltiples incidentes dilatorios que se han presentado; y, quizás, para no terminar como su antecesora, Martínez decidió blindarse para evitar otro diferimiento: el noveno.

Mediante providencia, convocó para el próximo 1 de octubre a la audiencia preparatoria de juicio, en una de las salas de la Unidad Judicial Penal Norte No. 2 de Guayaquil. Las partes deberán acercarse con anticipación para consultar la sala donde se desarrollará esa actividad.

Ante las peticiones de diferimiento de la diligencia por parte de la defensa técnica del procesado, ofició a la Defensoría Pública para que designe a un abogado del Estado, quien actuará en caso de que no acudan los particulares.

“Siendo así, no se podrá alegar falta de defensa dentro de la audiencia, ya que están prevenidos mediante el presente decreto judicial. El defensor público designado de conformidad al principio de publicidad deberá de comparecer a esta Unidad Judicial a fin de que pueda revisar el proceso para poder realizar la defensa del procesado y pueda intervenir en caso de ausencia de los abogados patrocinadores del procesado”, señaló el juez.

Advirtió, además, “que no se admitirá ninguna petición de diferimiento que tenga por objeto la dilatación del proceso de forma injustificada, actuaciones que serán consideradas al tenor de lo establecido en el numeral 6 del artículo 541 del Código Orgánico Integral Penal (COIP); esto, con el fin de evitar la caducidad de la prisión preventiva que pesa sobre Espinel.

El magistrado también apercibió a los abogados del procesado. En caso de no acudir a la diligencia se impondrán multas de hasta dos salarios básicos del trabajador en general, así como la suspensión del ejercicio profesional por 60 días. Entre los advertidos está Marco Quimís Villegas, quien generó la excusa del juez Guzmán, por amistad y compadrazgo.

Pero la advertencia también va para la Fiscalía. En caso de que no comparezca el fiscal que lleva ese proceso, se oficiará a la Judicatura para que emita la sanción correspondiente, de destitución del cargo. Y, para mayor seguridad, se notificó también a la Unidad de Gestión de Audiencias de la Fiscalía Provincial del Guayas para que envíe un fiscal de reemplazo.

Los diferimientos

1. Indisposición
La audiencia convocada el 8 de marzo se dilató por inasistencia de la abogada Vanessa Zavala, por salud.

2. En quito
La defensa solicitó el diferimiento de la audiencia convocada el 18 de junio. Debía estar en Quito por otro proceso.

3. De viaje
La audiencia señalada para el 29 de julio se difirió por pedido de Espinel. Sus abogados no estaban en el país.

4. Enfermedad
La audiencia convocada el 14 de agosto se pospuso. La abogada Zavala dijo que estaba indispuesta de salud.

5nen quito
El 28 de agosto tampoco se instaló. Zavala argumentó lo mismo del 18 de junio.

6. Excusa
Previo a la diligencia del 16 de septiembre, el juez Guzmán se excusó por amistad con uno de los abogados del procesado.

7. Recusación
El 24 de septiembre, la jueza Yesenia Hidalgo declaró fallida la diligencia, tras una demanda de recusación.