
La Judicatura tiene tarea
Los nuevos vocales del Consejo deben ser posesionados por la Asamblea. Se iniciaron los acercamientos para la transición y la entrega de la información.
Al designar a los cinco integrantes de la Judicatura definitiva, el Consejo de Participación transitorio hizo un exhorto: la evaluación inmediata de los jueces de la Corte Nacional de Justicia.
Esa tarea había sido asignada al Consejo de la Judicatura transitorio, presidido por Marcelo Merlo. Pero, las pugnas internas y el atraso en la elaboración de los parámetros de evaluación motivaron al Consejo transitorio a retirar el encargo.
Y no será la única tarea que espera a María del Carmen Maldonado (presidenta) y a los vocales Patricia Esquetini, Fausto Murillo, Ruth Barreno y Juan José Morillo. A los nuevos jueces que esperan su posesión en la Asamblea antes de asumir las nuevas funciones les corresponderá también conocer el caso de nueve jueces nacionales, cinco conjueces y una fiscal.
La Mesa de Verdad y Justicia pidió que sean investigados por presuntas actuaciones irregulares cuando conocieron casos de activistas, periodistas, policías y militares del 30S, estudiantes y dirigentes judicializados.
Uno de los afectados por esas supuestas anomalías es el mayor retirado del Ejército Fidel Araujo. Él denunció a tres fiscales y 12 jueces y conminará a que los nuevos vocales sigan adelante con los procesos.
La vocal saliente Angélica Porras menciona otras prioridades del Consejo como rediseñar la estructura de la Función Judicial en lo relacionado con las unidades multicompetentes que funcionan en muchas ciudades. Ella cree por ejemplo, que esa estructura funcionaría en ciudades pequeñas donde no hay mucha carga laboral pero no en ciudades como Quito, Guayaquil y otras.
Porras menciona la formación de jueces que hasta el momento solo han recibido capacitación. Enfatiza en un tema delicado: la corrupción judicial.
La Judicatura recibió denuncias en todos los niveles. Cita por ejemplo que en el caso de la Fiscalía el mecanismo es, en ciertos casos, abrir un expediente e involucrar a muchos “y para retirarles del caso se cobra”. Las quejas llegaron de todo el país pero afirma que no tuvieron pruebas válidas.
Como las denuncias no prosperaron en la Fiscalía, el Consejo destituyó a casi una docena de denunciados. Sobre el nuevo Consejo espera que comprendan que “la justicia no puede responder a una ideología específica o partidista”.
El exvocal Pablo Albán opina que las prioridades deben ser formular denuncias penales por las irregularidades ya comprobadas y cometidas por los consejos anteriores, la publicación de los resultados de las investigaciones de la Mesa por la Verdad y la Justicia y un plan de reincorporación de judiciales removidos por no someterse a presiones.
El abogado Jorge Acosta espera que el Consejo cumpla con la ley, haga las evaluaciones de ley y ponga en marcha los concursos suspendidos. Añade que “siempre es mejor tener un Consejo definitivo porque, como resulta evidente, el transitorio fue un rotundo fracaso, abundaron contradicciones entre sus miembros, se manejaron cambios de funcionarios a gusto y conveniencia”.
La presidenta del organismo espera ser posesionada antes hablar sobre sus expectativas. Se alistan reuniones para llevar adelante la transición y poner al día a los nuevos vocales.