Premium

Carlos Luis Morales reparte alimentos en la isla Puná
Prefecto. Morales busca refugio en fiestas infantiles en la isla Puná.Prefectura de Guayas

Instantáneas coronavíricas: Yunda y Morales montan el circo

En medio de escándalos de sobreprecios, ellos lanzan sus estrategias de distracción.  
Payasos y animalitos tienen buena imagen en las redes sociales.

El prefecto se rodea de payasos

Los medios de comunicación la tuvieron fácil: solo había que seguir las pistas que los corruptos dejaron en los contratos y que, en esta ocasión, eran más grandes y más visibles que las huellas de los elefantes en la mantequilla. En menos de un día se descubrió que el secretario de la junta de accionistas de la empresa Zerazamiz, contratada por la Prefectura del Guayas para el monitoreo estadístico de la expansión del coronavirus en la provincia, era en realidad un maestro ebanista; y el presidente de la compañía, cuya firma aparece en el contrato, un anciano de Chongón. Entretanto, el prefecto Carlos Luis Morales, sin temor a las asociaciones incómodas o sin percatarse del ridículo, se rodeaba de payasos y recorría la isla Puná repartiendo cajas de comida por el Día del Niño. No hay nada tan grave que un poco de populismo no consiga encubrir con éxito.

“Yo no soy juez para juzgar, pero es muy claro que ahí hay un robo”, sentenció el líder socialcristiano Jaime Nebot. El hombre que levantó la mano de Morales en gesto de victoria durante la campaña electoral y se lo vendió a la provincia diciendo que lo conocía “desde hace muchísimos años”, ahora lo deja solo ante su suerte sin el menor remordimiento y sin explicaciones para quienes votaron por Morales porque él lo pidió.

A1-5955427 (15955427)

El PSC se desmarca de la figura de Morales

Leer más

Ese tipo de alianzas, explica el legislador socialcristiano Henry Cucalón, surgen en épocas electorales. “Y no estamos en elecciones”. Si lo estuviéramos, ¿a Morales habría que apuntalarlo?

Resulta extraño que Cucalón, un asambleísta serio que siempre alude al principio de la responsabilidad política, se preocupe de dejar bien claro que, en el caso de Morales, ese principio no se aplica: “Estamos hablando de responsabilidades civiles y administrativas -dijo a este Diario- y la Fiscalía investiga supuestas responsabilidades penales”. Quizá la culpa es de quienes votaron por Morales, no de quienes lo pusieron de candidato. El correísmo enterró el concepto de responsabilidad política y ahora el socialcristianismo lo celebra. 

Jorge Yunda durante la liberación de un cóndor en el páramo del Antisana.
Alcalde. Una vez más, Yunda usa animales como cortina de humo.EXPRESO

El alcalde se faja y ofrece perritos

Jorge Yunda sabe cómo ganarse a las redes sociales. Luego de echar a perder su bien diseñado performance mediático de la cuarentena con un escándalo de corrupción como tantos otros, el alcalde de Quito sacó a pasear este fin de semana su vocación animalista. Las redes sociales del Municipio se llenaron de perritos perdidos o en espera de adopción. Ojitos, Pitufa, Pocha, Nala, Dana... Para morirse de la ternura estuvo el Twitter. Mientras tanto, en el páramo del Antisana, el alcalde asistía, pluma en mano, a la liberación de un cóndor hallado hace poco con heridas de perdigón y oportunísimamente repuesto. No hizo otra cosa el alcalde que aplicar las lecciones aprendidas en la campaña electoral que lo llevó al Municipio, cuando la vieja consigna de roba-pero-hace-obra tomó el camino de convertirse en acapara-frecuencias-pero-tiene-perro.

Cierto es que esa estrategia de comunicación le queda mucho mejor que la de ponerse a defender lo indefendible en tuits que revelan su falta de costumbre con las responsabilidades del servicio público. La responsabilidad de rendir cuentas, por ejemplo. Él cree que no le corresponde. Más aún: la sola idea de hacerlo le ofende. Más o menos eso es lo que dijo en el tuit que subió a su propio muro la tarde del viernes y por el cual fue arrastrado: “Me he fajado literalmente -escribió- para llegar a este momento con la triste perdida (sic) de 300 vidas de quiteños en esta pandemia y evitar unas diez mil muertes calculadas como para que alguien ponga en duda mi accionar!!”.

Rueda de prensa de Jorge Yunda

Instantáneas coronavíricas: Corrupción: dos casos más y van 24

Leer más

No dijo Yunda haberse fajado en sentido figurado, como anotó un perspicaz tuitero. No. Él se faja “literalmente”. Así, tan incómodamente encorsetado, se cree al margen del escrutinio público. ¿Cómo se le ocurre a nadie dudar de la compostura de un fajado? Inaudito.