Indiferencia a la corrupcion
Jesús es radical en su doctrina; dice que debemos contestar sí o no, cuando nos pregunten algo (Mateo 5:37); ser fríos o calientes en nuestros actos ya que a los tibios Dios los vomita (Apocalipsis 3:16). Por eso el editorial de EXPRESO es acertado ya que los ciudadanos no debemos ser grises con la corrupción; blanco o negro, nunca gris ya que este color simboliza indecisión. Siempre se nos enseñó que la corrupción era normal en la política; aprendimos la lección y nos volvimos apáticos hacia ella. ¿Qué podrán hacer los politólogos de hoy para curarnos de ese mal social generalizado que es la indiferencia a las pillerías de los políticos, pero que antes se las toleró y hasta se las justificó?
Miguel Ulloa Paredes