El bosque de Guallabuzho en Guachapala (Azuay), arde en fuego. Son árboles de pino, eucalipto, chaparro y vegetación nativa que se destruye desde el miércoles por efecto de las llamas.

La quema forestal está ubicada a 52 kilómetros al este de Cuenca, y fue declarada incontrolable por los organismos de socorro debido a la topografía del terreno y a la dirección del viento que va avivando los focos de fuego.

El fenómeno obligó a que el Comité de Gestión de Riesgos Cantonal de Guachapala declare la “emergencia” con la suspensión de clases en dos planteles educativos de Parig y Mailas, cercanos al incendio.

Unas 20 viviendas se encuentran en riesgo, según explicaron los socorristas tras aseverar que han debido construir con maquinaria privada (tractores) una línea de defensa; es decir, zanjas de dos metros de ancho para evitar que el fuego avance a sitios poblados.

Ayer se estimaba que se han consumido unas 110 hectáreas de vegetación. JMJ