El gran reto de la Autoridad son los infractores ilocalizables
Los correos inexistentes y direcciones domiciliarias con las que se registraron, pero que no concuerdan, motivaron a la Autoridad de Tránsito Municipal (ATM) empezar una campaña para localizar a supuestos infractores.
Los correos inexistentes y direcciones domiciliarias con las que se registraron, pero que no concuerdan, motivaron a la Autoridad de Tránsito Municipal (ATM) empezar una campaña para localizar a supuestos infractores.
Los nombres de los usuarios son publicados desde el viernes pasado en medios impresos, siendo el siguiente paso la difusión en una gaceta electrónica de tránsito.
La nómina corresponde a conductores que fueron captados por medios tecnológicos, como fotorradares y cámaras de vigilancia. La mayoría de las contravenciones son exceso de los límites de velocidad e invasión del carril de la metrovía.
El listado lo conforman 4.672 choferes. Son 6.699 contravenciones registradas, lo que evidencia la reincidencia de algunos usuarios de la nómina. La multa por la infracción es de 109,80 dólares.
La Ley de Tránsito establece que la multa debe impugnarse en tres días. Luego de ese plazo se presume la aceptación del contraventor. De allí se establecen diez días hábiles para la cancelación.
El día 11 se gestiona el cobro, que la ATM denomina persuasiva, porque intenta localizar a los usuarios para que se acerquen a pagar la multa en un plazo de dos semanas.
“Aplicamos todos los mecanismos posibles para localizar a los usuarios, porque lo importante no es recaudar sino que los conductores respeten las normas de tránsito”, indicó el director de Gestión de Infracciones y Servicios de Tránsito de la ATM, Édgar Lupera.
Al no lograr una respuesta de los deudores infractores continúa un proceso coactivo, en la cual se genera un auto de pago, cuya nómina también será anunciada en medios de comunicación.
A partir de ese momento, el infractor tiene tres días para el pago. Luego de ese plazo proseguirá la retención de cuentas bancarias o dimisión de bienes para el efecto.
Otra alternativa de cobro, en caso de no existir notificación legal, es durante la revisión técnica vehicular.
Pero aquello podría generar que el usuario no logre cumplir con el proceso de verificación, debido a la falta de recursos económicos.
Lupera destacó el rol que cumple el centro de mediación de tránsito, tras comentar que el 70 % de los usuarios que apelan ha obtenido un resultado favorable.
“Los radares funcionan normalmente, pero eso no exime que en ciertas ocasiones no logre identificarse la placa o tipo de automotor, siendo un punto a favor del conductor”, opinó el funcionario.