Antes de morir, el chef y presentador de TV de 62 años

Gino Molinari soplo las velas de su ultimo cumpleanos

2018 ha sido el año en el cual han partido el locutor Gabriel El Juri, el presentador Bernard Fougéres, la cantante Irma Aráuz y ahora Gino Molinari.

2018 ha sido el año en el cual han partido el locutor Gabriel El Juri, el presentador Bernard Fougéres, la cantante Irma Aráuz y ahora Gino Molinari.

El chef, conductor de revistas de variedades y de cocina, actor, ex concejal de Guayaquil, autor de libros de arte culinario y amigo ‘eligió’ el día de su cumpleaños 62, el sábado 17, para irse.

En las primeras horas de ese día las redes sociales se llenaron de mensajes de felicitación, con el pasar del tiempo, aquellos que le desearon muchos años más de vida, lamentaban su muerte.

En la tarde sentimos un impulso de llamarlo para saludarlo. Uno de sus empleados nos dijo que estaba dormido. Debido a que no pudimos comunicarnos con él le enviamos un mensaje de buenos deseos al Whatsapp, a las 14:57. Nunca respondió.

Hace varias semanas hablamos por teléfono. Entonces se encontraba internado en el hospital Luis Vernaza, donde lo atendieron por complicaciones con la diabetes. Una enfermedad que le fue diagnosticada a los 35 años y que debido a esta perdió los dedos de su pie izquierdo.

Después de un mes de asilado, la semana pasada fue dado de alta. “Se golpeó el pie y para salvarle la pierna le hicieron una limpieza quirúrgica. Estaba evolucionando, pero su corazón estaba muy delicado, nos habían dicho que si le daba algo podía quedarse ahí”, comentó Hernán Piedra, su colaborador durante 30 años y mano derecha.

El sábado, Gino, quien lucía más delgado, recibió la visita de amigos, como Georgianna Nebel, sus ahijados, parientes... Por ello se animó, se arregló y compartió con los que le hicieron la ‘caída’.

“Le compramos una torta que pudiera comer. Estaba feliz, emocionado, pero de un momento a otro convulsionó. Llegó la hermana, Giselle, a él le había dado un infarto, ya era tarde, lo que me consuela es que se fue feliz, cerca de las 19:00”, añadió.

Gino había conversado con sus colaboradores y les había pedido que cuando falleciera, sus restos fueran cremados. Así ocurrió durante la noche del sábado y madrugada del domingo. Además que las cenizas las coloquen en una vasija y junto a esta uno de sus retratos, que pongan un micrófono para que las personas amigas o familiares, si lo deseaban, le dedicaran unas palabras.

Algo que solicitó que no falte es el tema El chico chévere para que todos lo escuchen (al igual que cuando presentaba sus espacios de cocina). Este dice: “Él camina como quiere, y luce como quiere. Él es un chico chévere, chévere, chévere”. Ayer se esperaba la llegada de la hermana del expresentador de Ecuavisa y Gamavisión, Roxana, quien vive en Miami.

En octubre, la Municipalidad le entregó un reconocimiento y este mes la Prefectura del Guayas lo condecoró. Como no pudo acudir al último de los homenajes mencionados, estuvieron su progenitora, Jenny Negrete y su hermana Giselle.

En varias ocasiones recibió en su casa a la desaparecida Asociación de Cronistas del Espectáculo, que presidía Alsino Herrera y nos hizo saborear sus deliciosas recetas. Aún recordamos cuando compartimos su alegría por ser el único ecuatoriano en participar en la telenovela colombiana Yo soy Betty, la fea. Algunas veces acudimos a sus reuniones, conversamos de la vida, de los amigos comunes, de lo mal que veía la TV nacional, de viajes, del restaurante (Galería El taller) que tuvo, de Dios e incluso de temas holísticos y por supuesto, probamos su fanesca que preparaba en Semana Santa y nos dio consejos.

Hasta el cierre de la edición, sus cenizas se encontraban en la Sala Exclusiva 2 de la Junta de Beneficencia. Hoy está previsto el sepelio al mediodía, previamente se oficiará una misa.