
La fidelidad azul se pone a prueba
Con su equipo eliminado en octavos de final de la Copa Libertadores de América y ocupando posiciones secundarias en el campeonato ecuatoriano de fútbol, la asistencia que se dé hoy servirá para medir el estado anímico de la hinchada de Emelec.
Se autodenomina la barra más fiel, esta noche ese título será puesto a prueba. Con su equipo eliminado en octavos de final de la Copa Libertadores de América y ocupando posiciones secundarias en el campeonato ecuatoriano de fútbol, la asistencia que se dé hoy en el estadio Banco del Pacífico-Capwell servirá para medir el estado anímico de la hinchada de Emelec.
La dirigencia ya hizo su parte, poniendo las entradas para el partido ante Fuerza Amarilla a precios populares (3 dólares la general, 5 la tribuna General Gómez y el palco Pío Montúfar, 8 la tribuna San Martín), ahora le toca al aficionado demostrar que realmente quiere a su equipo, asistiendo a la Caldera y alentándolo en busca de un triunfo que lo ayude a superar el impacto anímico que implica haber sido eliminado de la Libertadores por un rival (San Lorenzo) que en el balance general no demostró ser superior.
El debut del lateral Juan Carlos Paredes tendrá que esperar, porque el técnico Alfredo Arias no lo incluyó en la lista de concentrados para el juego ante los orenses. En la nómina tampoco aparece Osvaldo Lastra, por lo que se da por seguro que la primera línea de volantes la integren Fernando Gaibor y Pedro Quiñónez, ausente en las últimas jornadas de la Copa y del torneo doméstico.
Luego de los resultados que se dieron en la quinta jornada de la segunda etapa -que termina hoy- Emelec bajó a la séptima posición de la tabla. Tiene siete puntos, por lo que necesita vencer a los dirigidos por el argentino Reinaldo Merlo para no perder la huella del líder.
Para el Bombillo no hay otra salida. Solo ganando la segunda etapa podría salvar una temporada que no ha sido buena en el campo deportivo.