Fantasmas que rondan la Estatal

después de la supresión de los exámenes de ingreso, se apoderó de la Universidad de Guayaquil el infelizmente célebre grupo Atala, que sembró el terror con garrotes, balas y bombas incendiarias para cogobernar. Desde entonces -salvo pocas administraciones- viene al alma mater de irregularidad en irregularidad, a pesar de que hace cinco años hubo una intervención política durante el correato. No aprendieron la lección.

Apoyamos a Roberto Passailaigue, presidente de la Comisión de Intervención, para que ponga orden en el alma mater porque la ciencia no tiene valor, sino cuando se convierte en conciencia. ¡Basta de violencia, vagancia y cuentas chuecas!

Lic. César Burgos Flor