Falconi demanda ‘actitud etica’ de los maestros ante casos de violencia sexual

A pocos días de que unas fallidas disculpas públicas indignaran a los padres y alumnos de la Academia Traversari, de Quito, el Ministerio de Educación sale a poner el dedo en la llaga de la violencia sexual en escuelas y colegios.

Ayer, en un comunicado publicado en su cuenta de la red social Twitter, el ministro del ramo, Fander Falconí, planteó una “cruzada ética” en favor de los estudiantes de todos los niveles educativos del país.

En la misiva, aunque no da cifras de casos, Falconí recalca que hace esta invocación “porque en los últimos días, según diferentes denuncias que hemos recibido” y casos que son de dominio público, “hemos constatado con indignación y hasta con horror, cómo varios estudiantes han sido víctimas” de diferentes tipos de delitos.

Sin mencionarlo, el caso de las disculpas públicas que debían emitirse a inicios de esta semana en la Academia Petro Traversari fue uno de los detonantes de esta medida. Los padres, alumnos y algunas de las víctimas de atentado al pudor no quedaron satisfechos con el pronunciamiento de las autoridades de ese plantel.

Como respuesta a todas esas denuncias, Falconí firmó un acuerdo por el cual se dicta el instructivo de actuación frente a los casos de violencia sexual en los establecimientos educativos. Además, de forma vinculante, se expidió el Protocolo de Actuación frente a situaciones de violencia. Ambos instrumentos serán socializados con la comunidad educativa.

En esta cruzada de Falconí, los maestros son la parte vital. Por ello, en la misma carta de ayer les deja claro el asunto: “Como autoridades del sistema educativo no podemos permanecer impávidos ante esta situación (...) Exijo y demando de ustedes una actitud ética”.