La cancha del estadio Worthersee en Klagenfurt (Austria) se transforma (por estos días) en un bosque nativo típico de Europa central. Se trata de la instalación de arte público más grande que acoge el país europeo denominada ‘For forest’.

El montaje se estrenó hace pocos días, y ha sido curada por el artista suizo Klaus Littman e inspirada en un dibujo distópico del arquitecto austríaco Max Peinther. Asimismo, hace una especie de manifiesto a dos problemáticas globales: el cambio climático y la deforestación.

Esto es posible por los casi 300 árboles instalados, algunos con un peso de hasta seis toneladas y con una variedad de especias, entre los que figuran álamos, arce de campo, sauce blanco y roble común. Estos llenan un espacio diseñado para aproximadamente 30.000 espectadores.

A medida que cambian las estaciones, se espera que el bosque cobre vida propia, atrayendo vida salvaje y cambiando de color. Además, a los largo de cada día, el trabajo formará un panorama cambiante.

La instalación estará disponible al público hasta el 27 de octubre de 2019. Posteriormente se replantará en un espacio abierto cerca del estadio, quedando como una ‘escultura forestal viva’.