Enjambre

Recuerdo esa película en la que una cardumen (banco de peces) le da indicaciones a nuestros queridos Nemo y Dory sobre cómo llegar a Australia. Aún sin hablar entre ellos, los peces, las abejas y los pájaros son bien conocidos por moverse coordinadamente en cardúmenes, enjambres o bandadas, desplegando formas que parecen un hermoso baile. Hay increíbles videos en YouTube sobre el tema bajo la frase “comportamiento de enjambre”.

Pero ellos no son los únicos. Ese fenómeno, estudiado apasionadamente por biólogos pero también por psicólogos, economistas, politólogos y todo tipo de interesados por el comportamiento social, es propio de los humanos también, aunque no necesariamente luzca que bailamos cuando actuamos bajo reglas de coordinación “sin comunicación”.

Creemos que no nos comunicamos (bien), pero los ecuatorianos también actuamos coordinadamente. Es pues obvio que cuando vivimos fenómenos sociales importantes -como el último cambio de gobierno por ejemplo-, actuamos como enjambre.

No encuentro otro motivo para que toda la agenda pública exista en función del fin del correísmo: culpabilización, judicialización, transición y tanto más por el estilo.

Pero tenemos otras cosas también que pensar, que bien ameritan que dejemos de lado aquellas supuestas prioridades y nos enfoquemos en otras. ¿O acaso para resolver el endeudamiento, el desempleo, la competitividad, aprovechar el bono demográfico que estamos dejando pasar, tenemos que referirnos a las cortes y a los culpables de nuestros males?

No se me malinterprete. Tras rejas tienen que estar los que lo merecen -y sí que lo merecen-. Pero esa no es la esencia de nuestra agenda pública ni lo que nos debería motivar a actuar en enjambre: coordinadamente.

Con nuestros medios y nuestras redes sociales, pero también con nuestros gestos sobre la vida frente a hijos, padres, colegas y amigos, vamos alimentando el comportamiento de nuestro enjambre. Debemos buscar motivos positivos que nos saquen del dramita semanal y nos alineen hacia un futuro de prosperidad.