El combinado nacional no solo acudió a sus ‘ahorros’ para totalizar 20 puntos y cerrar el año en tercer lugar de la gesta sudamericana,

Ecuador recurrio al banco y los ahorros

Suena a una operación financiera, pero la selección ecuatoriana de fútbol hizo uso de sus ‘ahorros’ tras la notable campaña en las eliminatorias sudamericanas del año anterior para terminar el 2016 en zona de clasificación al Mundial de Rusia.

Es que haber logrado la totalidad de puntos (12) en el 2015 permitió al equipo comandado por Gustavo Quinteros estar metido por el momento en la próxima gesta ecuménica de balompié, luego de que el año que está por culminar fue lleno de altibajos para la Tricolor, una muestra de aquello es que solo se alcanzaron 8 unidades de 24 posibles, una estadística que contrasta de forma negativa con el espléndido inicio que tuvo Ecuador en la búsqueda de su paso a la cuarta cita mundialista.

Pero el combinado nacional no solo acudió a sus ‘ahorros’ para totalizar 20 puntos y cerrar el año en tercer lugar de la gesta sudamericana, sino que también tuvo que recurrir al ‘banco’. Así fue que el entrenador de la Tricolor realizó variantes fundamentales para que mejore el funcionamiento del conjunto nacional y en la parte final del año exista el repunte que lo estaciona en la zona de clasificación.

Hay un viejo adagio que indica que los equipos se arman de atrás para adelante. Ecuador empezó así con su plan para mejorar. Quinteros le dio la titularidad al golero nacionalizado Esteban Dreer, quien mostró solvencia, voz de mando y seguridad en los tres palos. Por su parte, el otrora titular Alexander Domínguez, luego de perder continuidad en el Monterrey mexicano, también lo hizo en la Tricolor.

La zona del campo que sufrió más variantes fue la defensa con Arturo Mina y Luis Caicedo. Se trata de la pareja de zagueros centrales que fue clave para que Independiente del Valle alcance su paso a la final de la Copa Libertadores. En el caso de Mina, ahora con mayor experiencia tras vestir la camiseta del River Plate argentino y el ‘Cunti’, que mantuvo el nivel del torneo continental, se convirtieron en uno de los puntos altos del representativo ecuatoriano. Ambos reemplazaron a Gabriel Achilier y Frickson Erazo, quienes eran considerados titulares, pero que dieron licencias en ese sector y ahora quedaron para la variante.

El lateral Leonel Ramírez fue una grata revelación en la Tri, pues el jugador del Ferencváros húngaro había carecido de oportunidades como estelarista y cuando se dio la baja de Walter Ayoví por lesión supo hacerlo en buena forma.

La zona de volantes también tuvo un cambio fundamental. Jefferson Orejuela, mediocampista de corte y proyección, que brilló en la exitosa Libertadores de Independiente, ocupó el puesto de un discutido Carlos Gruezo, que ahora es suplente.

La baja de Antonio Valencia por lesión preocupó, sin embargo esto le permitió a Renato Ibarra mostrar su nivel. Las corridas y desequilibrio de la ‘Liebre’ fueron decisivas en las dos últimas jornadas de eliminatorias.

Con el ‘ahorro’, un buen ‘banco’ y la presencia de los que mantuvieron su rendimiento, Ecuador descansará cuatro meses en Rusia 2018, lugar del que espera no moverse hasta el final de la lucha por el Mundial.