El Ecuador y su destino financiero

Son muchas las recetas de los organismos internacionales -FMI y delegación del BID con 48 gobernadores- que han acudido a Guayaquil a título de prestar asistencia técnica y financiera a la débil economía del país, con una inyección de cerca de $ 1.000 millones. Solo puede responder con los pocos recursos que posee, en especial agrícolas y mineros, por la gran cantidad de recursos minerales que no han sido explorados ni explotados por falta de tecnología. No ha incursionado en gran minería con el manganeso existente en las costas de Manabí. Se espera que uno de estos organismos internacionales pueda dar asistencia técnica para su prospección, exploración, explotación y comercialización; sirve para elaboración de medicamentos y bombas nucleares, lo cual sí levantaría la economía de este país. La exigencia del FMI es imponer y hacer cumplir una receta que castigará a los trabajadores en sus ingresos, cuando se requiere más atención de los gobiernos en estos países pobres. En cuanto al BID, únicamente auscultó nuestra producción interna. Los defensores del neoliberalismo manifiestan que está correcto hacer todo lo que dicen estos organismos internacionales, pero no educan a nuestros jóvenes ciudadanos. Ecuador no solo debe ser un destino financiero para los países acreedores, sino un referente de materias primas que servirán como productos primarios para la elaboración de productos industrializados, para ofertarlos en el mercado internacional.

José Arrobo Reyes