Ni el mejor escenario es alentador. Hace un mes, la Asociación de Empresas Automotrices del Ecuador presentó un plan para dinamizar el sector, que incluye la digitalización de servicios y dar facilidades de pago. Parte de la propuesta, como anunció EXPRESO en su momento, dependía de la intervención del Estado, cuya respuesta aún esperan. Así lo explicó Genaro Baldeón, titular de Aeade.

“Una de las primeras barreras que tenemos son las regulaciones de la Junta de Política y Regulación Monetaria y Financiera que encarecen el acceso al financiamiento automotriz. ¿Cómo lo encarecen? Exigiendo una serie de requisitos para que los bancos puedan colocar este financiamiento, que obliga a colocar un patrimonio técnico de un 200 %, o a través de las garantías reales que se exigen para el préstamo específico de un vehículo. Estos requerimientos aumentan el valor del financiamiento, que ya de por si es uno de los más elevados de la región”, señaló.

Pero pese a la propuesta, no hay acciones concretas, algo que de acuerdo con Baldeón puede ocasionar que las pérdidas en ventas, que el gremio proyecta en un 45 % en el escenario más optimista, suban al 52 %. “Pedimos respuestas, porque si no, toda la cadena automotriz se verá afectada y se perderán los puestos de trabajo”, añadió.

Mientras esperan, las empresas han lanzado sus propias iniciativas para reactivarse, entre ellas la modificación de las condiciones de pago.

Hyundai, por ejemplo, arrancó este mes con el programa ‘Te devolvemos el valor de tu vehículo’, destinado para quienes hayan perdido su empleo o tenido que cerrar su negocio. “La propuesta consiste en darle al usuario la opción de retornar el vehículo, liberarse de una deuda y, en el caso de quienes hayan pagado al contado, recuperar un porcentaje de su dinero”, explicó David Martínez, gerente de Comunicación de la compañía.

A esta iniciativa se han sumado otras, como la posibilidad de dar una entrada del 10 % del valor del vehículo seleccionado e iniciar el pago de las cuotas a partir del 2021.

Martínez manifestó que en los últimos dos meses las ventas se han reactivado en un 10 %, cifra que esperan mantener hasta fin de año, aunque la participación sea reducida. “Queremos vender entre 6.000 y 6.500, una cifra que parece reducida, pero que en la situación actual es un desafío”.

Alejandro Jaramillo, gerente comercial de Chevrolet Ecuador, señaló que para la marca, la expectativa de venta en enero era de 38.000 autos, pero en el contexto de la pandemia calculan que las ventas se reducirán en un 50 %.

Hasta ahora, desde marzo solo han comercializado 1.633 vehículos, principalmente los más económicos del catálogo (ver subnota). “Hay que resaltar que se trata de una crisis generalizada, en la cual la industria automotriz es una de las más golpeadas a nivel mundial. Se estima que las ventas totales de la industria serán de 65 mil unidades al año”, dijo.

Aun así, se declaró optimista, señalando que, en el contexto de la pandemia, y pese a la reducción en los ingresos de los ciudadanos, habrá un vuelco hacia el uso del auto particular para reducir los contagios.

Para ello, la marca también ha desarrollado varias estrategias de ventas, entre esas el fortalecimiento de su canal digital, y otras facilidades de pago.

“Estamos ofreciendo un producto llamado ‘Crédito Familiar’. Con este programa el usuario puede acceder a un crédito conjunto con familiares de primer y segundo grado de consanguinidad o primero de afinidad que vivan en la misma casa, como hermanos, padres, hijos y suegros”, indicó.

Así mismo, con el fin de incentivar la reactivación, se alistan créditos especiales y campañas de marketing, sobre todo para mover los modelos de 2019 y 2020. Una propuesta será el Auto Sale, una feria virtual nacional propuesta por Aeade y que se llevará a cabo en agosto durante diez días.

“Tenemos que dinamizar nuestros canales virtuales, ya que muchas de las ventas se están llevando a cabo de esta manera. Esperamos que este sea el primero de varios eventos”, recalcó Baldeón.

Aun así, el titular del gremio reitera su pedido de que el Gobierno revise los requerimientos que han solicitado. “Es urgente que se haga una revisión consciente, sobre todo en las regulaciones tributarias. El sector automotriz aportó 10.000 millones de dólares el año pasado. Damos trabajo a 120.000 personas. De no hacerse, peligra la supervivencia de nuestras empresas”.

El año del modelo es lo de menos

A olvidarse del modelo del año. Los usuarios no están buscando estilo, sino precios bajos. Durante la pandemia, Chevrolet ha centrado sus ventas en los modelos Chevrolet Beat de 2018 y el Spark GT de 2019, e incluso la Chevrolet Dmax, esta última para trabajo de campo. Aun así, la marca ha implementado planes para dar mayor salida al Chevrolet Onix de 2020, que incluyen el pago de una entrada del 10 % y 72 meses de plazo. Igualmente, la marca Chery ha mostrado mayor salida a sus autos más económicos, entre ellos el Chery Q de 2020 y el Arizo 3, también de este año, cuyo valor fluctúa entre los $ 11.500 y $ 14.000.

Mientras tanto en Hyundai, los vehículos de mayor salida han sido el Grand i10 HB de 2019, el Verna y el Accent. Estos fluctúan entre los $ 14.000 y $ 19.000. “Estamos dando cobertura de seguro gratis por un año y ofreciendo planes de un 10 % de entrada, pagando la primera cuota desde enero de 2021”, detalló Martínez, vocero de la empresa.