Economía

Francisco Rivadeneira: “La renegociación formal con el FMI debería iniciar en agosto”

El exrepresentante de Ecuador ante el organismo conversó con EXPRESO sobre los diálogos del Gobierno para llegar a un nuevo acuerdo. 

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Rivadeneira llegó al cargo ante el FMI en 2015 y cumplió funciones hasta el 30 de junio de 2021.Archivo.

Luego de seis años hace maletas en Washington D.C. (Estados Unidos) para regresar al país. Francisco Rivadeneira dejó el cargo de representante de Ecuador ante el Fondo Monetario Internacional (FMI) el pasado 30 de junio de 2021 y en su reemplazo llegó Jorge Gallardo, hombre cercano al presidente Guillermo Lasso. Rivadeneira conversó con EXPRESO sobre la relación del Fondo con Ecuador, multilateral que se ha convertido en el principal financista del país, y las perspectivas de las renegociaciones que mantendrán las actuales autoridades para continuar con el programa de financiamiento. La política económica del Gobierno de Lasso está en pausa mientras renegocia con el multilateral.

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- ¿Qué perspectivas hay para la renegociación con el FMI que ha emprendido el Gobierno de Guillermo Lasso? ¿Hasta qué punto pudo avanzar usted?

- Hasta el 30 de junio no había negociaciones de carácter oficial o formales, pero ya había una serie de reuniones para ir preparando una posible negociación. Básicamente se estaba trabajando en revisar los datos. Se tiene que actualizar los datos para iniciar la discusión. Es comprensible porque las nuevas autoridades necesitan tiempo para instalarse y entender qué está pasando. Por eso, en términos más reales, yo pienso que la renegociación per se formal se dará probablemente en agosto y la expectativa sería que haya una misión, como normalmente se hace para este tipo de cosas, como se ha hecho en el pasado, in situ en Ecuador y que se reúna la encargada del Escritorio de Ecuador con sus contrapartes del Gobierno ecuatoriano. Probablemente en agosto estén por allá, si no se complican las cosas con la COVID-19.

- ¿Qué ocurre después?

- De ahí, una vez que se constate que ha habido un cumplimiento de las metas para los períodos que están establecidos por parte del Gobierno ecuatoriano podríamos estar pensando que se dé un desembolso, de manera realista, en el mes de septiembre, una vez que el Directorio se reúna y apruebe la decisión. Estaría previsto que se haga la segunda y tercera revisión pendiente del programa y se recibiría dos desembolsos de unos 800 millones de dólares. Esto fuera de la nueva emisión de Derechos Especiales de Giro (DEG), que también se espera para septiembre, unos 1.000 millones (de dólares) más.

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- ¿Cuáles pueden ser los puntos más críticos de la renegociación con el FMI?

- No creo que va a haber una discusión muy extensa, que abarque muchos puntos, yo creo que en términos generales va a haber consenso en las nuevas autoridades y el Fondo. Probablemente uno de los temas más sensibles es una reforma tributaria. El Fondo Monetario recomienda, y aquí quiero ser bien claro, recomienda que Ecuador haga una reforma tributaria y por obvias razones, porque la vía tributaria es la forma más segura de conseguir financiamiento para el presupuesto y dentro de las posibles herramientas ha recomendado que podía subir el IVA. Pero es el Gobierno quien toma la decisión final si se va por esa vía o no. Lo único que se negocia con el Fondo son las metas cuantitativas. Tú te pones de acuerdo que vas a llegar a estas metas cuantitativas en ciertos trimestres y de ahí el Gobierno, con base a las recomendaciones del Fondo, decide hacerlo por una vía u otra.

Si el Gobierno puede cumplir las metas de otra manera, el Fondo no tiene por qué oponerse.

- ¿Cómo podría quedar una reforma tributaria?

- Si el Gobierno puede demostrar que puede cumplir de otra manera las metas, el Fondo no tiene por qué oponerse. Hacer una reforma tributaria no es negativo. Una cosa es discusión sobre si se sube o no el IVA, que es circunstancial porque ahí está la mayor capacidad de recaudación. Hacer una reforma que te permita simplificar, reducir tributos, pero al mismo tiempo, al hacer eso, aumentar la recaudación, aumentar el número de contribuyentes, es positivo. Yo creo que en el país nadie se opone a eso. Se puede hacer una reforma tributaria, que contribuya de una manera positiva a incrementar los recursos al presupuesto. Yeso habrá que complementarlo con otra vía. Y esa vía puede ser el gasto, seguir reduciendo el gasto o financiamiento interno o externo.

No creo que va a haber una discusión muy extensa, que abarque muchos puntos.

- En las anteriores negociaciones con el FMI, ¿la reforma tributaria era el punto más sensible que se discutió?

- Sí, era uno de los más sensibles, pero había otros, como el tema de los subsidios a los combustibles. Aunque más bien el Gobierno del presidente Moreno tomó la decisión de avanzar progresivamente. Al FMI y al Banco Mundial le pareció una buena decisión, pero siempre recomendaron hacerlo con prudencia y creando los mecanismos necesarios para compensar a la población, informando y comunicando cómo hacer la reforma. El tema tributario y de la necesidad de subir impuestos es sensible.