
Demanda eléctrica crece y exige hábitos responsables en temporada navideña
La demanda del país sigue creciendo y expertos advierten la urgencia de adoptar medidas de eficiencia energética en hogares
En el Ecuador, las festividades de fin de año vienen acompañadas de un intenso movimiento en hogares, comercios e industrias. La iluminación decorativa, los equipos de sonido y la mayor actividad doméstica incrementan significativamente la demanda energética. De acuerdo con datos del Operador Nacional de Electricidad (CENACE), el país aún necesita alrededor de 866,5 megavatios de nueva generación firme para cubrir el crecimiento del consumo y fortalecer sus reservas de seguridad. Este escenario vuelve urgente promover hábitos de uso eficiente y responsable de la energía, tanto para evitar sobrecargas como para cuidar el presupuesto familiar.
Eficiencia energética que reduce costos
En este contexto, expertos impulsan que la ciudadanía disfrute de las celebraciones de manera segura. Su mensaje central destaca que la eficiencia energética no solo reduce costos, sino que también aporta a la estabilidad del sistema eléctrico nacional. “La energía se disfruta más cuando se usa con inteligencia”, afirma Esteban Miño, Jefe de Proyectos Eléctricos de INSELEC, quien señala que las fiestas representan el momento propicio para adoptar buenas prácticas que prevengan accidentes y optimicen el consumo.
Las recomendaciones abarcan acciones simples y accesibles. Verificar el estado de cables y conexiones evita riesgos de cortocircuitos; no sobrecargar regletas disminuye la posibilidad de sobrecalentamientos; optar por iluminación LED reduce significativamente el consumo; y encender las luces decorativas solo cuando son necesarias se traduce en ahorro inmediato. Para las actividades de mayor carga, como lavado o planchado, se recomienda aprovechar los horarios de menor tarifa —entre las 22:00 y las 08:00— una medida que muchos hogares aún desconocen.
Ahorrar energía para elevar competitividad
En industrias e instituciones, la eficiencia energética adquiere un matiz más técnico. Tecnologías como variadores de velocidad y sistemas de corrección del factor de potencia permiten producir más con la misma energía, elevar la competitividad y reducir costos operativos.
Miño coincide en que el país enfrenta un doble desafío: educar al consumidor y modernizar sus sistemas eléctricos. "Si bien la temporada festiva aumenta el consumo, también abre una oportunidad para transformar hábitos y construir una cultura más consciente, capaz de reducir riesgos y contribuir a la estabilidad del sistema eléctrico durante todo el año", señala.