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Andrés Villamil
Andrés Villamil espera que en el 2021 la producción de aguacate despunte sustancialmente.Guillermo Lizarzaburo

La Costa de Ecuador se enlista en la exportación con su aguacate Hass

En la comuna de El Azúcar, Santa Elena, se inicia la producción comercial. El alza del consumo en el mundo, así como su precio, alientan la inversión

Una finca ubicada en la vía a la Comuna de El Azúcar, Paltos Santa Elena, del inversionista chileno Roderick Maclean Boyd, es hoy por hoy el punto de referencia para el futuro de la producción de aguacate de exportación. Es allí donde la autoridad pone empeño para el desarrollo de un negocio que en corto plazo puede generar millones de dólares.

El Ministerio de Agricultura cree que apenas 10.000 hectáreas podrían generar al menos $ 350 millones anuales. Pero será del talento de Andrés Villamil, administrador de la hacienda, de sus errores y de sus aciertos, de donde saldrá el modelo de producción de Ecuador.

“En esta finca está el punto de partida para el resto de los que se quieran meter en el negocio”, dijo a Diario EXPRESO el director del Instituto Nacional de Investigaciones Agropecuarias (Iniap), Andrés Andrade.

EstrategiaEcuador quiere atraer más inversión extranjera. De hecho, se busca que la compañía Camposol, mundialmente conocida, pueda tener facilidades para establecerse.

El próximo año se verá la verdadera cosecha -dice Villamil-, que sembró en agosto de 2018 y que ya comenzó una producción adelantada. No está aún en sus niveles máximos. “Deberíamos apuntar a al menos unas tres toneladas por hectárea”.

La floración inicia por agosto o septiembre y la cosecha en abril. Pero todo ese nuevo conocimiento del aguacate Hass en la Costa ha nacido de errores. Por ejemplo, el de usar una variedad local como patrón, que no sirvió, así como el de la cantidad de plantas por hectárea. “Creemos que deben ponerse unas 500 plantas por hectárea” frente a las más de 600 que había cuando empezó la inversión. Son 50 hectáreas de aguacate sembradas, aunque tienen otras 450 disponibles.

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Según el Ministerio, el aguacate ecuatoriano tiene acceso sanitario en aproximadamente 30 destinos. Es un producto con gran demanda por su contenido nutricional, pero para que pueda ingresar a más mercados los productores deben obtener certificaciones como Global Gap, Buenas Prácticas Agrícolas (BPA) o, a su vez, certificación orgánica.

El contenido de grasa -de la saludable- es clave en la conquista de consumidores y de ahí que la zona El Azúcar, por su temperatura baja por las noches, sea ideal para que el Hass gane grasa.

Podemos hacer 80 o 90 mil plantas de Zutano para viveros, porque tenemos plantas de 800 árboles de las que sacar semillas.

Andrés Villamil

La demanda de aguacate se ha disparado en Estados Unidos, Europa y China. En 2017 creció un 35 % comparado con la conseguida en 2016. La expectativa de crecimiento de la demanda del producto en los mercados internacionales estima un crecimiento anual del 3 % en el periodo de 2016 a 2025, llegando a un máximo de 7,6 millones de toneladas para 2025, según un reporte de USAID, la Agencia de los Estados Unidos para el Desarrollo. Eso ya se refleja en el crecimiento mundial de las importaciones de aguacate en 2019: un 2 % respecto del año 2018. Desglosado por países, las cifras son aún más estimulantes: Estados Unidos, un 43 %; Países Bajos, un 14 %; Francia, un 6 %; España, un 5 %; y Reino Unido, Canadá y Alemania, un 4 % cada uno. Estos países participan del 76 % de las compras mundiales de la fruta, anota el ministerio.

Por ahora las fechas de producción en Ecuador están supeditadas al clima. No obstante, es posible inducir la floración para cosechar en los meses en los que no lo hace ni Perú, México, Colombia ni Chile. En Perú, hacen anillados para programar la cosecha.

La hacienda que Paltos Santa Elena tiene en la costa, ha recibido, de hecho, visitantes de ese país y de Chile, donde el sembrío está más avanzado, y “les ha gustado el cultivo, lo que se ve, por lo menos, en producción”, asegura Villamil.

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La calidad de los viveros es clave.Guillermo Lizarzaburo

En su plantación, la variedad Zutano es la elegida como patrón. Se le injerta la variedad Hass, que fue importada. Ahora, la idea del Iniap es trabajar en un proceso de mejoramiento genético que permita a Ecuador tener material para la demanda que se vendrá.

El Iniap debe ayudar para hacer genética in vitro, por ejemplo, señala el ministro Xavier Lazo en una entrevista con EXPRESO. “Esto, lo que se ha logrado en Paltos Santa Elena, es un avance. Ahora hay que avanzar en propagación”.

El Gobierno y la empresa privada se plantean como desafío desarrollar este tipo de cultivo que puede generar recursos de forma rápida. No solo con miras a grandes inversionistas, sino también para familias de zonas aptas para el cultivo. “Puede ser para agricultura familiar con los comuneros”, señala el Iniap.

Estos proyectos se impulsarán con BanEcuador y con el Fondo Nacional de Garantía con la ampliación de las líneas de crédito, según el Ministerio de Agricultura. Además, la CFN (Corporación Financiera Nacional) tiene una línea para aguacate de 20 años plazo, con cinco de gracia y una tasa del 8 %. Se incluyen dos años de gracia total y después, al tercer año sigue el periodo de gracia, pero con intereses, sin amortizar el capital. También se gestiona un crédito de la CAF (Banco de Desarrollo de América Latina).

El objetivo de Paltos y de las empresas que vengan será la exportación, principalmente, a Europa y Estados Unidos. China, por su parte, está demandando un producto pequeño, una unidad personal de 150 gramos. “Los chinos quieren llevarlo en el bolsillo, en la lonchera”. En Ecuador, en supermercados, hoy el kilo se vende a 2,70 dólares.