Tras el plantón que los pescadores artesanales, realizaron el pasado 14 de abril, debido a que la marina no les permitió salir a pescar por falta de documentos habilitantes, una brigada de matriculación de embarcaciones, inicio la semana pasada la legalización y el proceso de poner sus documentos al día.

Sin embargo, solo un poco más del 50% logro poner en regla sus documentos, que le permitan salir a faenas de pesca, informó Miguel Mejillones, dirigente pesquero, que estuvo coordinando este proceso con las autoridades de la marina y la Subsecretaría de Pesca.

La razón que muchos se quedaron sin legalizarse fue la falta de requisitos y la inconsistencia de algunos documentos, como no haber realizado el Curso OMI, indispensable para el permiso de pesca, documentos de cambio de estructura de las embarcaciones de madera a fibra y, en algunos casos,    papeles de cambio de compra y venta, cuando la embarcación han pasado a ser de otro dueño, fichas médicas entre otros, detalló el dirigente.

La Renovación de documentos que se realizó fue matricula, arqueo, inspección de seguridad y permiso de tráfico. El comandante del puerto de Posorja, Washington Tamayo, ha señalado que hay una alta informalidad en los manejos de los requisitos en los documentos que deben tener.

Antes del proceso de legalización, un 70% estaba en la informalidad y solo 30 % estaba con sus documentos en regla.

La campaña duró tres días. Roberto Cruz, presidente del gremio pesquero pidió que esta campaña se repita, para que todos puedan alcanzar la legalización. Los que no alcanzaron a poner en orden sus documentos, tendrán que hacerlo en la capitanía del Puerto de Guayaquil.

El sábado pasado la embarcación Andrés Gabriel, de Wilson Jacinto Torres, fue retenida por no portar documentos y usar artes de pesca de arrastre en una zona prohibida, informó Byron León, funcionario de la Inspectoría de Pesca.