Habilidad. Los vendedores de pescado cortan al animal con mucha destreza para obtener los mejores filetes.

El dorado, un pez que se convirtio en tradicion

Cada zona del país tiene su producto estrella; y en Santa Rosa, puerto pesquero del cantón Salinas, es el pez denominado dorado la principal fuente de ingreso económico de los más de cinco mil artesanos que se dedican a esta labor.

Cada zona del país tiene su producto estrella; y en Santa Rosa, puerto pesquero del cantón Salinas, es el pez denominado dorado la principal fuente de ingreso económico de los más de cinco mil artesanos que se dedican a esta labor.

Francisco Mejillón, de 86 años y uno de los pescadores más antiguos que habita en este sitio, recuerda que la pesca de esta especie lleva décadas y en tiempos remotos su captura se la realizaba de manera ancestral.

Los nativos amarraban piolas a unos fragmentos de caña de dos metros que ellos sostenían en sus botes, utilizaban carne de pescado salado para atraer al pez y cuando este picaba, con un pequeño copo de red los agarraban.

Los pescadores de Santa Rosa aseguran que antiguamente al dorado lo encontraban en abundancia a poca distancia del puerto, pero con el pasar del tiempo el pez fue alejándose de la orilla, ahora deben viajar entre 60 y 80 millas para poder capturarlo.

Ahora utilizan enormes redes para la pesca de esta especie de carne blanca que se exporta a otros países. La mayor cantidad del producto que se comercializa en el extranjero sale de Santa Rosa.

El octogenario José Tigrero asegura que sus abuelos están entre los primeros artesanos que pescaban el dorado, que en principio era considerado como un pez para gente pudiente y no tenía gran aceptación en el consumo popular.

Santa Rosa se fundó como puerto en 1941 y una década después empezó con fuerza a venderse el dorado. “Desde hace mucho tiempo nos hemos hecho buena plata con este pescado, para nosotros es la bendición que Dios nos ha regalado y esperamos que nunca se acabe”, dice Tigrero.

Por su exquisito sabor la carne de dorado es una de las más preferidas por los consumidores, pero hay que saber comprarla, pues existen dos clases de este pez: “el de piel amarilla” que es el más preciado y es el que se exporta, y “el de piel blanca” que es más barato y a decir de los pescadores debe ser consumido del mar a su mesa, porque al momento de congelarse pierde su sabor.

El dorado puede ser preparado en cebiches, frito, hornado, al vapor, etc. En todo plato es delicioso, de allí su fama, expresan los pescadores.

En Santa Rosa también existe un grupo de personas que se dedica al eviscerado del dorado, “trabajamos para que el cliente lo lleve a casa listo a prepararlo”, manifestó Jorge Lainez, uno de estos. (F)