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Política. Diana Caiza es oriunda de la comunidad Chibuleo San Francisco.Cortesía

Diana Caiza: de vender ajo en la calle a la Alcaldía de Ambato

Un personaje que escaló desde el comercio informal hasta el cabildo de capital de Tungurahua

Diana Caiza Telenchana hace historia en Ambato. De acuerdo con el 99,67 % de las actas procesadas por el Consejo Nacional Electoral (CNE), sería la nueva alcaldesa de la cuna de los ‘Tres Juanes’, con más de 30 % de los votos.

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Diana es indígena y en los 201 años de historia democrática de esa ciudad es la primera mujer en ocupar el sillón de la Alcaldía.

Ella nació en la comunidad de Chibuleo San Francisco, parroquia Juan Benigno Vela. Desde muy niña sus padres le enseñaron el valor al trabajo. Recordó que cuando apenas tenía dos años de edad su padre murió en un accidente automovilístico y su madre, Juana Telenchana, fue quien sacó a la familia adelante.

Tiene tres hermanos quienes también ayudaban a su madre en las tareas del campo, pues cosechaban el ajo que se siembra en el páramo y de ahí lo llevaban a vender a la ciudad.

La alcaldesa electa trabajó como vendedora informal porque les resultaba imposible conseguir un puesto dentro de los mercados en Ambato: “Antes había más esa brecha social, de mucha discriminación al sector indígena”.

El comercio informal es uno de los mayores problemas en las calles céntricas de Ambato y ella espera resolver eso creando la economía violeta, para ayudarles a emprender a las mujeres y también creando escuelas de emprendimientos.

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Desde niña, su mamá le enseñó el valor del trabajo, quien la llevaba a la escuela de lideresas de Dolores Cacuango para que sean mujeres independientes y emprendedoras.

Mientras estudiaba también trabajaba, pero antes de terminar el colegio quedó embarazada. Junto a su esposo, Rodrigo Llambo, quien es gerente general de una cooperativa de ahorros, lograron salir adelante.

Diana Caiza, una vez casada, empezó a emprender con la venta de perfumes. Su esposo, quien también fue canillita en la adolescencia, la alentó a que siga los estudios. Se graduó en Administración de Empresas. Luego hizo una maestría.

Es madre de tres hijos a quienes les inculca la constancia y el valor del trabajo.

En la política incursionó en el 2019 y fue la concejala más votada en el sector rural y por eso fue elegida vicealcaldesa. Pero se retiró por desacuerdos con el actual alcalde Javier Altamirano. “No estaba en mis planes retornar a la política, pero mi pueblo me convenció”, expresó.