Banco Central. La fachada de la institución bancaria.

Despues de China, el gran fiador es el Central

Es el segundo mayor acreedor del Estado. La deuda subió a $ 2.850 millones.

China funge como la boya financiera de países africanos o latinos, como Mozambique o Venezuela. Incluso un libro catapulta esa bonanza de acreencias que ha regado por el mundo como “La silenciosa conquista china”, porque no ha sido de forma militar, sino más bien económica, según explican sus autores.

De alguna forma todos ven a China como un asidero económico; pero, claro, el dragón asiático no es que sea filántropo, más bien tiene sus grandes intereses: dar efectivo, no tan barato, a cambio de materia prima en la mayoría de los casos. De hecho, Ecuador y el mismo EE. UU. mantienen fuertes deudas con China. Pekín y Washington tienen una suerte de relación de amor-odio con eso del poder que gana el primero y que desbancaría al segundo del podio económico.

En tal caso, tanto para Ecuador como para EE. UU., ese país es su mayor acreedor. La deuda estatal ecuatoriana con esa nación asiática bordea los ocho mil millones (a junio). La gran parte se está pagando con barriles de petróleo.

Pero, internamente, se está consolidando otro prestamista importante: El Banco Central de Ecuador (BCE). Hasta el 22 de julio, lo que el BCE ha prestado al Ministerio Finanzas, el encargado de pagar a proveedores, empleados o contratistas con el Estado ecuatoriano, suma 2.846 millones de dólares, según cifras del Central.

El monto es muy superior a las deudas contraídas un año atrás, cuando alcanzaban los 509 millones de dólares, según explica a Diario EXPRESO, Xavier Andrade, director ejecutivo del Instituto Ecuatoriano de Economía Política (IEEP).

Pero la duda que ronda por los pasillos de analistas, catedráticos y hasta opositores es: ¿de dónde proviene el dinero que ha prestado el Central a Finanzas? Es que el BCE recibe como depósitos, el dinero de instituciones privadas, como los bancos, así como de públicas, como los municipios y prefecturas. También tiene dinero del propio Gobierno, reseña.

El Central luego invierte esos recursos, en activos líquidos; es decir, que sean ágiles de vender. Pero aquí una observación. Lo que está pasando es que el BCE está colocando esos dineros en papeles que emite Finanzas que, si bien son a corto plazo, en caso que los dueños pidieran esos efectivos que están en su custodia, ¿será fácil para el BCE venderlos para hacerlos efectivo y devolverlos a sus propietarios originales, como los depositantes o los afiliados al IESS ?, cuestiona.

El gerente del Banco Central, Diego Martínez, corrobora que esa entidad ha otorgado a Finanzas esos millones (2.850) en calidad de “préstamos de liquidez de corto plazo”. Por otro lado, el ministerio también ha buscado en las bolsas de Guayaquil y Quito una masa de 1.817 millones, a junio, para cubrir el déficit fiscal. Lanzó Certificados de Tesorería (Cetes), bonos y cupones. Así la deuda pública interna bordea el cerco de los 13 mil millones de dólares.