Elecciones. Alejandro Domínguez ocupaba el cargo interino en el organismo por Napout. Ayer en los sufragios fue respaldado.

El crudo hizo crecer la clase media

En la primera publicación de la serie del petróleo los extrabajadores de Anglo indicaron el legado que dejó el hidrocarburo a Ancón. Ahora el historiador económico Guillermo Arosemena, dice a Diario EXPRESO los efectos en la economía del país.

¿Se exporta crudo de forma significativa desde 1972, qué efecto tuvo eso en la economía del país?

Fue una época en que hay un crecimiento sostenido de la economía. La construcción se fortaleció y hay un resurgimiento de la clase media, se generaron nuevas líneas de exportación. Eso en lo positivo.

¿Y en lo negativo?

Fue el mal manejo de las cuentas externas. Preocupó (en ese entonces) el aumento de la tasa de la inflación, lo que llevó a que el Gobierno aumentara el encaje bancario para evitar más crédito que genere una mayor inflación.

¿Fue la época de las deudas en dólares, aunque la moneda del país era el sucre?

Sí, y eso fue un absurdo porque había que pasar el dólar al sucre. Paralelamente el Gobierno empezó a endeudarse en dólares. Aunque, todo este mal manejo de las cuentas externas no se observaba, porque la economía crecía.

Al llegar a los 80, ¿qué pasó?

En los 80 hubo el fenómeno de El Niño. El agro fue muy afectado. Por ejemplo, la producción del cacao cayó dramáticamente entre un 30 y 40 %. Y no le quedó más al Gobierno de turno que devaluar la moneda y no se paró hasta que llegó la dolarización.

Saltemos a este siglo con un precio de petróleo desplomado desde más de $ 100 a $ 29,44.

La economía funciona en base a ciclos, son como las olas del mar. La prosperidad y la recesión no son eternas. El error fue pensar que los $ 100 por barril de crudo se los iba a tener de por vida.

Ahora, ¿qué queda?

Hay una desaceleración mundial que podría convertirse en una nueva recesión. Hago énfasis en el podría, porque hay una serie de indicadores que no coinciden en que hay una recesión. Internamente, en Ecuador, es otra historia. Aquí hay contracción.

¿Cuál es la solución?

La solución la tiene el Gobierno, debe aceptar la realidad y crear medidas que estimulen la producción, como ejemplo el retiro del cobro de impuestos a la salida de divisas. El mundo está lleno de indicadores y se debe fijar en dónde hay baja nota para mejorar. Por ejemplo, el indicador de la facilidad para hacer negocios. Se debe ver qué califica el Banco Mundial para indicar si un país es o no proactivo en crear los negocios. Pero, no se debe olvidar que las horas más oscuras son antes de que llegue la aurora. Lo importante es tener planes. Pero, ¡cuidado! Todavía no estamos en el fondo.