Crisis de la politica

El poder y la dinámica política que se desarrolla en la sociedad, son realidades totalmente opuestas. Las organizaciones que actúan en el amplio espacio social adquieren carta de reconocimiento cuando logran sintonizar su ideario con el conjunto, o con un importante segmento, de las demandas colectivas.

Si una organización logra cumplir su objetivo de mayor importancia, que es llegar a la dirección del Estado, gozará de la complacencia de los sectores que intervinieron para apoyarla, y podría además conseguir la adhesión de ciertos núcleos que, sin haber sido parte de su clientela, ven en el ascenso del sujeto ganador la posibilidad de encontrar espacio y ocupación, o la probabilidad de que sus demandas sean tomadas en cuenta y canalizadas.

Esa es la realidad política, y se traduce en la práctica a través de experiencias más o menos coincidentes.

Lo que ocurre en nuestro país puede servir de muestra para identificar una crisis de representatividad, debido a la falta de coincidencia entre lo que los partidos políticos hacen, la forma cómo se ejerce el poder desde la institucionalidad oficial, y lo que la colectividad espera de aquellos y del Gobierno.

El hecho de que más del 60 % de los electores no crea en los partidos políticos, y de que solo un poco más del 40 % confíe en la efectividad del régimen, significa que existe una clara ruptura entre la política asumida como ejercicio y lo que la gente quiere. Enfrentar estos difíciles escollos es, por consiguiente, una tarea ineludible de esos entes protagónicos: el Gobierno para legitimarse, y las organizaciones para justificar su existencia. Mientras el primero y las segundas se devanan el seso para evitar que su debilitamiento sea catastrófico, dentro de la sociedad surgen, se diseminan y se consolidan micropoderes con creciente reconocimiento y aceptación.

Si los partidos quieren recuperar su vigencia, y si el poder quiere rebasar su carácter clientelar, deben priorizar las demandas antes que las individualidades, y recoger esas nuevas y múltiples energías.