En la pantalla. Isabella, Matías y Sebastián se separaron del grupo para estar “más cerca” de los dinosaurios.

Un contacto virtual con los dinosaurios

La emoción en la carita de la pequeña Isabella del Mónaco, de tres años de edad, fue solo superada por las risas, gritos y saltos cuando esos seres animados aparecieron en la gran pantalla frente a ella, en una “realidad” en la que parecía que estaban

La emoción en la carita de la pequeña Isabella del Mónaco, de tres años de edad, fue solo superada por las risas, gritos y saltos cuando esos seres animados aparecieron en la gran pantalla frente a ella, en una “realidad” en la que parecía que estaban uno al lado del otro.

Primero fue la lluvia de meteoritos que empezaron a caer “frente a sus pies” y después, los rostros extrañados de unos dinosaurios que aparecían entre la multitud.

Así empezó la muestra de la nueva atracción de CityMall, el Planeta jurásico, una habitación en la que una gran pantalla mezcla la realidad aumentada para ubicar al visitante en medio de una jungla en la que se desarrollan feroces enfrentamientos entre un triceraptos y un tyrannosaurus rex, o se observan paseos de dinosaurios “tranquilos, en una forma de reconocimiento a los visitantes de “su mundo”.

Matías y Sebastián, de 5 y dos años y medio, fueron parte de esos visitantes. Al igual que Isabella también se emocionaron cuando vieron a los dinosuarios plantarse junto a ellos en la gran pantalla dispuesta en ese cuarto de 165 m2, con la pantalla que los incluía en la escénica “prehistórica”.

El recorrido por el mundo de los dinosaurios dura ocho minutos, en los cuales se van desarrollando diferentes épocas de la era jurásica, con lluvia de meteoros hasta la formación de mares y la era glaciar, donde aparecen animales marinos: pequeños pingüinos se paran frente a los visitantes, mientras que una ballena salta, provocando nuevamente risas cuando apareció la ilusión del agua salpicándolos.