Un CAL de brazos cruzados durante más de un mes que durará la campaña electoral
Cuatro de sus integrantes van por la reelección o por otro cargo de elección popular. El cuerpo se quedará sin cuórum. Una solución está en análisis
Una incompatibilidad que ningún legislador vio y que tendrá su impacto en la Asamblea Nacional durante la campaña política. Las reformas a la Ley Electoral establecieron que aquellas autoridades de designación popular que corran por la reelección deben tomar licencia sin sueldo durante el periodo de campaña, pero ningún asambleísta pensó que esa reforma ahora dejaría al Consejo de Administración Legislativa (CAL) de brazos cruzados durante algo más de un mes.
La Ley Orgánica de la Función Legislativa, en su artículo 112, establece que quien reemplace a su principal que a su vez ocupa un cargo administrativo, no tendrá esa misma condición. Y ante la novedad de que cuatro de los siete miembros del CAL irán a la reelección o correrán por otro puesto de elección popular, este cuerpo colegiado se queda con tres de sus siete miembros y, por lo tanto, sin cuórum para sesionar.
Marcelo Espinel, miembro del Observatorio Legislativo de la Fundación Ciudadanía y Desarrollo, concluye que fue una omisión de los asambleístas no solo dentro de las reformas a la Ley Electoral sino a las de la Ley Orgánica de la Función Legislativa y que pudo provocar un debate incluso más profundo, si se hubieran percatado a tiempo. “Es complejo porque imaginemos que los suplentes ocupen los cargos administrativos, pero si estos pertenecen a otro partido político hay una complicación. O si llamas a una elección de miembros del CAL y se cambian las fuerzas políticas en el pleno puede haber una modificación. Hay un factor político que influye”.
En este punto tal vez la Asamblea debe enfocarse en aquello que ya está en discusión dentro del pleno.
El presidente de la Asamblea Nacional, César Litardo, así como las legisladoras Ana Belén Marín y Rina Campain, todos miembros del CAL, irán por la reelección. No así Cristina Reyes, impedida legalmente para un periodo más en el Legislativo, quien correrá por una curul en el Parlamento Andino. Ante ese panorama, Patricio Donoso, segundo vicepresidente de la Asamblea Nacional, reconoce que la ley (y precisa que “no fue hecha por nosotros sino hace algunos años”) no establece que los miembros del CAL tengan alternos, por lo que vislumbra un tema “complicado” que “debemos tratar en su debido momento”, dijo sin ahondar en el mismo.
Debemos abordar el proyecto de reformas al Código de Trabajo porque el actual data de 1938.
El Consejo de Administración Legislativa tiene, entre otras atribuciones, planificar las actividades legislativas, establecer la prioridad para el tratamiento de los proyectos de ley, imponer sanciones a los asambleístas (a excepción de aquellas que son decisión del pleno), calificar pedidos de juicios políticos y más. A decir de Espinel, la Asamblea puede vivir un poco más de un mes sin su CAL, considerando las facultades. No es el escenario ideal, admite, pero “si esta Asamblea Nacional se demoró más de un año en tratar el juicio político a María Paula Romo, cuál es la diferencia con un mes o dos”.
