Cafendelet, el espíritu político ecuatoriano servido en un café

Cafendelet, el espiritu politico ecuatoriano servido en un cafe

Definitivamente es un lugar diferente. Cafendelet, ubicado en el Kilómetro 13 de la vía Samborondón, es un sitio que encanta y engancha. Que gusta mucho por su sabor -allí se sirven platillos tradicionales, caseros y 100 % ecuatorianos- y divierte a todos con su pintoresco humor.

Y no necesariamente porque se cuenten chistes, sino porque en sus paredes se puede leer un sinfín de graciosas y recordadas frases, protagonizadas nada más y nada menos que por los expresidentes o actuales políticos del Ecuador.

Algunas como ‘Nadie se me baja de la camioneta’, de Abdalá Bucaram y, otras, como ‘Ha habido en el Oriente un volcán que eructó’, del excandidato presidencial Álvaro Noboa, están enmarcadas en el lugar. No obstante, las favoritas -y las que incluso motivan a los clientes a hacerse una ‘selfie’ con ella- son las de la asambleísta Lourdes Tibán.

Pero eso no es todo. Cafendelet exhibe también –a través de caricaturas y fotografías- la historia política del país. Revive hechos protagonizados, por ejemplo, por Jaime Roldós, Carlos Julio Arosemena, León Febres Cordero, Sixto Durán Ballén... Allí uno retrocede en el tiempo y mientras lo hace, cómodamente, puede sentarse a degustar un café.

¿De qué tipo? El que prefiera, la variedad es inmensa. Los hay fríos y calientes, dulces, con crema, exóticos, amargos y hasta con especias frutales. El frappe de oreo y el chocolate caliente con jengibre y naranja, sin embargo, son otras de las especialidades que uno debe arriesgarse a probar. Este último, espumoso, cremoso, espeso pero suave. Como una barra de chocolate derretida llena de sabor.

A estos los puede acompañar de deliciosos postres como la torta mojada de chocolate, de manzana, de choclo o el esponjoso cheesecake de requesón. Un dulce -y quizás uno de los más antiguos del mundo que utilizan lácteos- aromatizado, fabricado de forma artesanal.

Como es de esperarse, también hay manjares de sal. Divididos en platillos fuertes (lasaña, bistec de carne acompañado de patacones, camarones reventados...) y bocaditos, que puede pedirlos por unidad o en combos ‘bautizados’, como es su costumbre, con originalidad.

‘La Fuerza de los pobres’, ‘Con infinito amor’ y ‘Un solo toque’ son algunos de ellos. E incluyen, entre otras cosas, café o chocolate, jugo y huevos, y bolones, tortillas de verde, empanadas o humitas. Allí usted puede elegir el que más lo convenza. Todos son deliciosos.

Como se podrá haber dado cuenta, en Cafedelet -un negocio familiar, propiedad de Judith Figueroa, Gina Veintimilla de San Miguel y los hermanos Nathalie, Adela y Víctor San Miguel- todo gira en torno a la política. ¿Por qué? Víctor, el visionario del proyecto, lo explica: “Quisimos tener una cafetería, pero diferente: un punto referencial culinario en el Ecuador... Pensamos en la política, uno habla de ella todo el día. La nuestra es colorida, nos dijimos, puede funcionar”.

Y ¿lo hizo? A decir de ellos, sí. Pues llevan apenas dos meses en el mercado y el lugar ya es un punto de referencia en la ciudad. “Nos visitan de todos lados. Incluso el tatarasobrino del expresidente Alfredo Baquerizo Moreno ha estado aquí”. Él llegó para fotografiarse junto a la foto de Baquerizo, colgada también en el lugar.

A futuro prevén abrir sucursales en otros puntos de la ciudad. También sumar a sus utensilios una réplica del sillón presidencial. “Queremos que cada rincón tenga historia. No buscamos la polémica, solo le apostamos a lo jocoso. Al ambiente sano, divertido. Real”.

Para mayor información contáctese al 6052944. Ofrecen servicio a domicilio y atienden de martes a domingo.