Batalla liberadora contra la corrupcion

A medida que se ha vuelto incontenible el destape de la corrupción en la última década en nuestro país, los ecuatorianos seguimos a la espera de soluciones que no atinamos a intuir de dónde vendrán. Por lo tanto, debemos asimilar que las dos (aparentes) facciones implicadas en la corrupción, se disputan el poder para tratar de borrarla de los registros para evitarse que la justicia prevalezca, y, lo más duro para ellos (ideal para nosotros), devolver los dineros que pertenecen al pueblo. El pueblo clama por una reestructuración integral del Estado que garantice la independencia de sus poderes, a través de una Constituyente, y que evite además el retorno de quienes se consideran dueños del país.

Leonardo Cueva Piedra